Más de un centenar de personas privadas de la libertad de una cárcel platense y agentes del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) conformaron un lazo rosa humano en el Día Mundial de Lucha contra el Cáncer de Mama como forma de concientizar acerca de la importancia de la prevención y para promover que cada vez más mujeres accedan a controles, diagnósticos y tratamientos oportunos y efectivos.
La iniciativa tuvo lugar en la Unidad 10 Melchor Romero del Servicio Penitenciario Bonaerense, donde internos y agentes se unieron en el área de esparcimiento y recrearon el símbolo más representativo de la pelea contra la enfermedad.
La jornada en el penal comenzó en la mañana del lunes con una charla de dos integrantes de la Dirección de Evaluación y Desarrollo del Personal del SPB. En primera instancia, la médica Anabella Macia brindó una charla al personal en la que hizo referencia al valor de la autoexploración de las mamas, a la vez que resaltó la importancia de realizar los controles ginecológicos de forma periódica.
Luego, Analía Martínez narró su experiencia en la lucha contra la enfermedad y repasó el trabajo que realiza como voluntaria de Lazo Rosa La Plata. Además, describió la tarea de orientación, contención y acompañamiento que brinda como miembro del Movimiento Ayuda Cáncer de Mama (Macma) y se mostró dispuesta a colaborar con las mujeres que lo requieran, como así también con sus familiares y allegados.
La experiencia contó con el aval del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, y la directora de la Unidad 10, Miriam Irala, principal impulsora del evento, agradeció la colaboración de quienes se comprometieron con el 19 de octubre y se mostró notablemente conmovida, ya que es una mujer recuperada de cáncer de mama que, en 2018, debió afrontar 16 sesiones de quimioterapia, 30 días de radioterapia y una cirugía.
“Tengo todo registrado en fotos y ayer, por primera vez, decidí compartirlo con mis compañeros para concientizar y compartir que, para las personas que padecimos la enfermedad, no todo es color rosa”, contó la funcionaria, a la vez que insistió en la importancia de los chequeos médicos.
Finalmente, con la presencia de la directora general y del subdirector general de Coordinación del SPB, Cristina Córdoba y Eduardo Acuña Laz, los penitenciarios y los privados de la libertad se unieron en un lazo rosa.