Un auspicioso convenio logró esta tarde el Banco Alimentario del Gran La Plata con la Municipalidad de La Plata, que apunta básicamente a implementar programas tendientes a la disminución del hambre y la mala nutrición de los sectores vulnerables de la Región.
El intendente, Julio Garro, visitó las instalaciones del Banco Alimentario, donde se llegó a este acuerdo que refuerza la acción solidaria de la entidad que desde hace poco preside Daniel Fileni.
El convenio tiene el objeto de establecer un amplio marco de colaboración entre las secretarías y el Banco para el desarrollo conjunto de:
a) Acciones destinadas a fomentar, difundir y desarrollar valores solidarios, tanto para los miembros de ambas organizaciones como para el público en general.
b) Acciones y programas tendientes a la disminución del hambre y la mala nutrición de los sectores vulnerables de la Región.
c) Proyectos, programas y acciones destinados al fortalecimiento institucional de ambas organizaciones.
d) Promoción de la articulación y el desarrollo entre productores locales y el Municipio con un fin altruista.

El siguiente es el detalle del convenio completo:
MERMELADA DE NARANJA
Por otra parte, ya cosechó sus frutos el programa mediante el cual el Banco Alimentario juntó naranjas en el centro de la Ciudad donde hay muchos naranjos, para la elaboración de mermeladas que irá destinada a los sectores más vulnerables.
Tal como informó este diario, el pasado sábado 28 de agosto, entre las 10 y las 15 hs., el Banco Alimentario organizó una cosecha urbana en la que más de 30 voluntarios recolectaron las naranjas de los árboles de cinco intersecciones del centro platense: calle 47 entre 11 y 12, calle 47 entre 12 y 13, calle 11 entre 50 y 51, calle 11 entre 51 y 53, y calle 11 entre 53 y 54. El colectivo de la ONG retiró los frutos al finalizar la jornada y los llevó hasta su sede para fabricar una mermelada con un gusto solidario y bien local.
“Como asociación civil (y ciudadanos/as de la región) notamos que cada año miles de naranjas platenses terminaban en la basura. Por lo que nos preguntamos, ¿por qué no “recuperarlas” de ese destino y fabricar mermeladas para entregarlas a los comedores?” se preguntó Gastón Zappalá, director ejecutivo de la ONG y voluntario del evento Misión Naranja. Y los resultados ya están a la vista.