De la Redacción de 90 Líneas.- Y un día se cansó. El arzobispo de La Plata, Víctor Manuel Fernández, es un hombre que cultiva un bajísimo perfil, pese a que integra el núcleo más cercano y de mayor confianza del Papa Francisco y que está considerado un intelectual, un teólogo que el ex cardenal Jorge Bergoglio consulta en forma casi permanente.
Es por ello que cuando habla (o en este caso, escribe) su voz resuena con mucha fuerza. Y encima, esta vez lo hizo para desmentir, en términos durísimos, a medios de comunicación y a los periodistas que «no saben leer un texto» o, en su defecto, «obran con muy mala leche» (Fernández dixit).
El posteo del arzobispo en su cuenta de Twitter fue producto de una serie de informaciones que publicaron los medios hegemónicos y sus satélites mintiendo sobre su supuesta oposición al pase sanitario.
En rigor, Víctor Fernández explicó a sus feligreses que durante una reunión en la Gobernación con la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez, se informó a las autoridades que «era muy difícil (para la Iglesia) exigir y controlar un pase sanitario al ingreso de las misas»; que para una cosa así tendrían que «contratar personal adecuado», y que en ese sentido enfrentan «un problema de logística». No obstante, los obispos presentes en el encuentro plantearon que «no nos oponemos a que el Estado haga ese control».
Pero… Los medios hegemónicos y algunos periodistas en particular, los mismos que se opusieron a la cuarentena, al barbijo, a la vacuna rusa, a la vacuna para niños y niñas, a cualquier tipo de restricción y, ahora, al pase sanitario, aprovecharon esas palabras para, fieles al «nuevo periodismo siglo XXI» que si no miente, oculta, y si no oculta, manipula, decir que el religioso se oponía a esa medida que tomó el Ejecutivo bonaerense.
Y «Tucho» Fernández se cansó.
Y posteó, bajo el título «Cocoliche permanente», que «lamentablemente a cada rato hay que salir a aclarar lo que a cualquier periodista se le ocurre decir sin una gota de ética».
Fernández consideró que es «una barbaridad» pretender mostrarlo en una postura de rebeldía contra el pase sanitario que rige desde el martes en la provincia de Buenos Aires para poder acceder a determinadas actividades culturales, deportivas, religiosas y recreativas en espacios cerrados, así como la realización de trámites presenciales en organismos públicos y entidades privadas.
«CADA VEZ TODO SE VUELVE MÁS RASTRERO»
En un párrafo, el arzobispo aseguró que «lo peor fue el diario La Nación, porque afirmó que la Iglesia se opone al pase sanitario en los eventos masivos. Y esto ya es una barbaridad», enfatizó.
Definió a la reunión en la Gobernación como «una conversación muy amable, donde analizamos varias alternativas. Esto es lo que comuniqué a mis fieles como lo hicieron otras diócesis de la provincia de Buenos Aires (…) pero varios medios salieron a decir que yo me rebelo contra el pase sanitario en La Plata».
«Cada vez más parece que los periodistas no saben leer un texto, o sino obran de muy mala leche. Cada vez todo se vuelve más rastrero«, concluyó.
Vale aclarar que «cocoliche», teniendo en cuenta que Fernández tituló su posteo «Cocoliche permanente», es un término lunfardo que se refiere a la jerga que utilizaban los primeros inmigrantes italianos mezclando palabras de su lengua con otras del castellano, dando origen de ese modo a una comunicación muy poco precisa, pues no se hablaba adecuadamente ninguno de los dos idiomas.
EL POSTEO DEL ARZOBISPO DE LA PLATA
