De la Redacción de 90 Líneas.-
La primera vuelta de las elecciones presidenciales en Francia, celebrada ayer con un alto nivel de abstención, fue casi un calco de los comicios del 2017: el “independiente” liberal y actual presidente de la república, Emmanuel Macron, y la ultraderechista Marine Le Pen pasaron al balotaje tras obtener 27,3% y 24% de los votos, respectivamente (24% y 21,3% hace cinco años).
No obstante, Macron pudo festejar gracias a la excelente performance de la formación ultraizquierdista Francia Insumisa, liderada por Jean-Luc Mélenchon, que obtuvo el 22% de los votos, quedando a sólo dos puntos porcentuales de Le Pen.
Y es que Mélenchon ya convocó a sus seguidores a “votar contra Marine Le Pen” en la segunda vuelta que se llevará a cabo el 24 de abril.
El crecimiento de la izquierda radical, que en 2017 había alcanzado un 19,5% de los sufragios, y la debacle total de los partidos tradicionales (Los Republicanos -derecha liberal- y el tradicional Partido Socialista de Francia) fueron los puntos salientes de esta elección.
Los Republicanos, por ejemplo, hace cinco años habían salido terceros con el 20% de los votos, mientras que ayer no llegaron al 5%. Esta es la fuerza política heredera de los otrora poderosos gobernantes franceses Jacques Chirac y Nicolas Sarkozy.
En tanto, el Partido Socialista (re)fundado en 1969, un año después del Mayo Francés, que supo gobernar la república centroeuropea en cuatro ocasiones, cayó desde el ya patético 6,3% obtenido en 2017 a apenas el 1,7% con la candidatura de Anne Hidalgo.
Francia 2022
Ultraderecha-Centro-Ultraizquierda
Así las cosas, el mapa político francés quedó dividido en tres grandes franjas: el centro liberal, la ultraderecha y la ultraizquierda, que suman el 72 por ciento de los votos, y formaciones menores como la del neofascista Éric Zemmour (6,8%), los republicanos, los socialistas, los ecologistas y los comunistas.
En estos comicios se registró el segundo nivel más alto de abstención de la historia de Francia, tras el récord de 2002. El ausentismo se ubicó en el 26,2% de los ciudadanos y ciudadanas habilitados para votar, es decir, cuatro puntos porcentuales más que en las últimas presidenciales de 2017.
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¿Más peleado que en 2017?
Las encuestadoras hablan de un 52-48 en la segunda vuelta a favor de Macron. Alguna ha medido, incluso, un 51-49. Otra, una diferencia un poco mayor, pero nunca holgada.
Según los analistas, la “moderación” que le imprimió la ultraderechista Marine Le Pen a su imagen y a su discurso en los últimos años le ganó el favor de votantes de centro, comúnmente llamados independientes. No obstante, los críticos de la líder radical dicen que “lo importante es leer su plataforma electoral, que no tiene nada moderado; al contrario”.
Según la cadena BBC, ese corrimiento al centro de Marine Le Pen -aunque más no sea en su discurso- podría deparar una segunda vuelta muy peleada; al menos mucho más que en 2017, cuando Macron ganó el balotaje 66,1% a 39,9%.
“Un sondeo publicado en la noche del domingo 10 de abril por el canal francés BFM TV, sitúa a Macron con el 52% de las preferencias para el balotaje y a Le Pen con el 48%”, puntualizó la agencia británica de noticias.
Y añadió: “Otra encuesta, realizada por Ifop-Fiducial, ubica la proyección para el 24 de abril en 51% para Macron y 49% para Le Pen. Mientras que Ipsos-Sopra-Steria le da al actual presidente una ventaja más amplia, de 54% contra 46%”.
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