Por Florecia Mignacco
La pandemia vinculada a la proliferación mundial de COVID 19, ha transformado la organización del trabajo de forma trascendental y muchos de los cambios que empujó llegaron para quedarse. El traslado de los puestos de trabajo de la empresa hacia los hogares fue forzado, siendo una de las alternativas más elegidas por las organizaciones para poder continuar las actividades más allá de la segmentación obligada.
Las restricciones a nivel del contacto entre personas hacían difícil poder vislumbrar una vuelta a las oficinas y puestos de trabajo pronta, por lo que hubo que pensar otras formas para recuperar la actividad laboral. No fue fácil esta transición y reacomodamiento, no sólo de las personas, sino de los procesos para no perder en la transformación la eficiencia y eficacia hacia la rentabilidad de las unidades de negocio.
Las organizaciones que han podido atravesar con adaptabilidad e innovación esta etapa crítica que revolucionó el mundo del trabajo y de las organizaciones, se han posicionado con mayor solidez en el mercado y han marcado una diferencia considerable con la competencia. El teletrabajo se ha instalado en el mundo en el año 2020 como una alternativa frente al contexto pandémico y se ha sostenido en la Argentina hasta la actualidad.
El trabajo virtual fue difícil de instalar en las organizaciones con mayor resistencia al cambio y menor poder de adaptación. Sin embrago, las empresas más flexibles con capacidad creadora e innovación pudieron convertir sus equipos de trabajo presenciales en equipos de trabajo apoyados en dinámicas virtuales, estableciendo novedosos canales de comunicación que resultaron funcionales a las nuevas formas de organización. La idea que prevaleció fue que el costo no los sufra la colaboración entre los miembros de los equipos de trabajo.
Las empresas con mayor poder de adaptación en este contexto crítico también han invertido en capacitación para fortalecer a sus lideres en esta nueva modalidad de trabajo para poder gestionar virtualmente en el marco de una planificación estratégica reformulada en función a estos nuevos escenarios.
Los beneficios del trabajo virtual en modalidad home office fueron varios. Las empresas dejaron de invertir en espacios edilicios idóneos para dar lugar a su fuerza de trabajo reduciéndose a sí mismo costos tales como los servicios o beneficios para los colaboradores, muchos empleadores se ahorraron en almuerzos, snacks y refrigerios, por ejemplo. Los procesos a si mismo, se vieron agilizados y el coworking se fortaleció uniendo a trabajadores de distintas partes del mundo a trabajar colaborativamente en proyectos conjuntos. Las posibilidades aumentaron a la hora de potenciar los negocios y estos beneficios se debieron a la apoyatura de los esquemas de trabajo y los negocios en la tecnología.
Los colaboradores se vieron motivados por la flexibilidad, la inmediatez, el acortamiento del tiempo y de las distancias y el potenciamiento de sus gestiones por el descubrimiento mediante la capacitación de herramientas informáticas de trabajo. La existencia de plataformas de reunión virtual es de uso diario en los trabajos en la actualidad favoreciendo la inmediatez entre los encuentros, la agilidad en la comunicación y el trabajo a distancia. A su vez, los colaboradores, en su mayoría, han podido equilibrar de mejor manera la vida laboral con la personal.
La extensión de la vacunación contra el COVID 19 y el retroceso de esta enfermedad a nivel mundial, ya no la hacen tan amenazante siendo más controlada, lo cual implica la caída de las extremas medidas de prohibición de contacto. Más allá del nuevo escenario global, en Argentina un importante porcentaje de empleos siguen aún manejándose en modalidad virtual o híbrida, que implica días de trabajo presencial y días de trabajo virtual. Sin embargo, a nivel mundial se percibe un movimiento de metamorfosis nuevo que empuja nuevamente al trabajo presencial como única modalidad de empleabilidad.
LA VUELTA A LA PRESENCIALIDAD
Pero si la implementación del trabajo en modalidad Home office trajo tantos beneficios, ¿por qué hay una franca tendencia mundial a la vuelta al trabajo presencial en las empresas?
Las empresas más importantes y reconocidas con locación en Estados Unidos han convocado a la vuelta a la presencialidad a sus colaboradores entre el año 2022 y 2023 aunque en diferentes modalidades.
La empresa de tecnología Google, limitó el teletrabajo y convocó a sus empleados a la vuelta a las oficinas a mediados del año 2021, con un esquema hibrido que les permite trabajar desde sus hogares algunos días de la semana.
La empresa de comercio electrónico Amazon compelió a sus empleados a retornar a la presencialidad en el año 2022 haciendo una notificación formal pudiendo únicamente tomarse cuatro semanas al año de home office con previa autorización de los gerentes de área.
Goldman Sachs, el banco de inversión más importante y reconocido del mundo, denomino “aberración” al teletrabajo afirmando que esta modalidad de trabajo no se encuentra alineada a su cultura.
Estas son solo algunas de las empresas que han decidido volver al trabajo presencial, aunque no todas lo hacen de la misma manera ni al mismo ritmo. Aunque algunas ofrecen más flexibilidad que otras, no es una locura anticipar las resistencias que hubo de los empleados de estas organizaciones.
TENDENCIA MUNDIAL
La tendencia mundial a la vuelta al trabajo presencial, abandonando el modo virtual con exclusividad, es un tema controversial que genera opiniones diversas y enfrentadas entre los empleadores y los empleados. Lo llamativo es que esta impronta fue marcada principalmente por el sector tecnológico impulsando el regreso de los equipos de trabajo a las oficinas y puestos de trabajo in company. Este impulso fue marcado por la comprobación en la medición de los resultados de una marcada baja de productividad de los equipos de trabajo. Se asume de tales análisis, basados en comparativas entre el trabajo presencial y el virtual, que el primero no sólo fomenta el sentido de pertenencia hacia la empresa, sino que también facilita la comunicación, promueve la innovación, fomenta la motivación y suma positivamente a la cultura organizacional.
En el trabajo virtual existen dificultades como la posibilidad de que se enfríen los vínculos o que las áreas actúen como islas sin interacción con el resto del contexto organizacional, no son muchas las empresas con departamentos de RRHH activos que generen gestiones para favorecer a la vinculación y la comunicación. Además de los problemas de comunicación se han visto lideres que no han llegado a adaptarse a las modalidades virtuales de liderazgo lo cual trae dificultades e interferencias a nivel de la bajada de objetivos ya sea a nivel de la comunicación o la falta de claridad en el traslado de los mismos. La difusión de las estrategias ha sido nula o ha caído en malos entendidos por dificultades en su traslado.
Los problemas en la difusión de la visión y la comunicación de los objetivos e intenciones de la gerencia, no sólo impacta de forma negativa en el rendimiento de las personas que se lidera y en la eficiencia y eficacia de las gestiones, sino también en la motivación de los empleados que se sienten sin rumbo al carecen de feedbacks sobre sus desempeños. La desmotivación pueden afectar a si mismo, a modo de un movimiento vicioso en círculo, aún más rendimiento de los equipos de trabajo virtual causando incumplimiento de metas, perdida de tiempo y dinero, impuntualidad, reducción del nivel de compromiso, confusión y desarticulaciones de equipos.
Todos estos factores han llevado a replantear globalmente la modalidad virtual de trabajo al 100% instalada en tiempos de segregación por pandemia.
Ahora bien, los colaboradores habituados a la flexibilidad y la comodidad del home office no están tan dispuestos a soltar estos beneficios fácilmente, lo cual ha llevado a los empleadores a pensar modalidades híbridas que contengan los beneficios de ambas modalidades.
Así también las empresas y los equipos de trabajo no van a dejar de apoyarse en el uso de herramientas tecnológicas exploradas y desarrolladas en pandemia como un modo que facilite el trabajo a distancia y que han sido clave en la optimización de los procesos.
El desafío de las empresas en la actualidad es volver paulatinamente a modalidades presenciales hacia equipos de trabajo de alto rendimiento, sin desmotivar a sus colaboradores al retirarles los beneficios adquiridos con el teletrabajo. Pero ¿cómo hacerlo? ¡Siendo creativos de nuevo!
El contexto actual, no solamente en Argentina, es volátil, complejo y ambiguo y exige continuamente de nuestras corporaciones competencias tales como la adaptación, la agilidad de respuesta, la innovación y la creatividad. Son este tipo de empresas con colaboradores que compartan este tipo de cultura las que van a responder a las nuevas demandas y a los frecuentes cambios del mercado que impactan en forma directa en las empresas.
Resulta necesario frente a estas nuevas exigencias hacer divertir nuestra inteligencia con la creatividad e idear posiciones mixtas que traigan beneficios a ambas partes. Esto es apelar nuevamente al poder creativo de las organizaciones para combinar de la mejor manera las exigencias de la presencialidad, la flexibilidad potenciadora del trabajo virtual, con beneficios y nuevas condiciones hacia posiciones hibridas. Por eso se dice…aprende las reglas como un profesional para romperlas como un artista…
