Desidia, desorganización e improvisación total; 1.500 profesionales jóvenes que debían empezar su carrera en enero, a la buena de Dios; despidos que impiden el funcionamiento de laboratorios e institutos; extensión del presupuesto 2023 para manejarse a lo largo de todo 2024 (imposible); ausencia total y absoluta de alguna autoridad que firme la compra de insumos básicos para el quehacer diario de los investigadores e investigadoras. Así está hoy el sistema de ciencia y técnica de la República Argentina, reconocido en el mundo entero. Así está hoy el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet).
El neofascista Javier Milei había prometido a sus votantes que iba a eliminar el ministerio de Ciencia y cumplió. Pero también les aseguró que cerraría o privatizaría el Conicet y que arancelaría las universidades nacionales. No obstante, teniendo en cuenta el gigantesco movimiento opositor que esas medidas generarían, ha optado por dejarlos morir lentamente. ¿Cómo? Desfinanciándolos. A ese tema se refirió en una nota el investigador y decano de la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP, Mauricio Erben, y aquí recogemos párrafos salientes.
El éxodo de los mejores estudiantes universitarios y de jóvenes (y no tan jóvenes) científicos y científicas está a la vuelta de la esquina. Una vez más… Se formaron durante largos años en las aulas de las escuelas públicas y de las casas de altos estudios del país, merced a un Estado que invirtió en ellos y a su vocación de trabajar y aportar aquí. Pero al igual que Onganía, Videla, Menem, Cavallo, De la Rúa y Macri, Milei y su troupe los están expulsando.
La situación “dramática” e “inédita” del Conicet
Andrea Gamarnik, viróloga de prestigio a nivel local e internacional, habló hace unos días con el periodista Ernesto Tenembaum y describió una “situación inédita” en sus más de 20 años de carrera en el Conicet por el grado de caos e improvisación que reina.
“Me preocupa como argentina ver lo que está pasando en el país, me preocupa como científica (que) se está desmantelando un sistema científico muy valioso, (y eso) no tiene razón de ser, hay desidia, hay inoperancia, no hay personas que encabecen las instituciones”, dijo en Radio Con Vos.
“Estamos ante un recorte de presupuesto en el Conicet, por ejemplo. No se ha aprobado el presupuesto 2024. Las consecuencias de eso son tremendas. Lo que pasa es que son tantas cosas a tantos niveles… En relación al Conicet, por caso, este problema de no tener presupuesto 2024 hace que aproximadamente 1.500 jóvenes profesionales, que estaban esperando el anuncio de las becas para empezar a trabajar en el mes de enero, están congelados, ni siquiera se hicieron los anuncios”.
El químico, investigador principal del Conicet y decano de Exactas (UNLP), Mauricio Erben, afirma que la extensión del presupuesto 2023 para todo 2024, con los niveles imposibles de inflación existentes, persigue un objetivo muy claro: En lugar de cerrar directamente organismos, el gobierno nacional los ahogará presupuestariamente y dejará morir de inanición al sistema de ciencia y técnica (CyT) de la República Argentina.
“Buscarán un lugar de trabajo fuera del país”
En relación a los 1.500 jóvenes profesionales, Andrea Gamarnik subrayó que “son 1.500 personas que apostaron a trabajar en la Argentina, son los mejores porque van a ser seleccionados de entre mucha más gente, y están en una situación en la cual la incertidumbre es total. Probablemente, lo que van a hacer es buscar un lugar de trabajo fuera del país. Entonces el sistema va a colapsar”.

“El sistema del Conicet en este momento está en una situación dramática. Hubo despidos de personal administrativo que es muy importante porque hay institutos del Conicet que tienen uno o dos administrativos, por lo que la falta de este personal no permite que los institutos funcionen. No se anunciaron tampoco las promociones dentro de la carrera del Conicet, o sea que dentro del Conicet tenemos problemas gravísimos”, prosiguió la eminente viróloga.
Siguió: “Por otro lado, la Agencia de Promoción Científica y Técnica, que es la que vela por la interacción público-privada de la que tanto hablamos, con la importancia que reviste que la ciencia se transfiera a la sociedad, no tiene dirección en este momento. No hay nadie que esté a la cabeza de este organismo. Entonces, no hay quien firme los proyectos, no hay quien firme los procesos administrativos, está todo congelado; por ejemplo, no podemos hacer compras porque no tenemos quien firme…” O sea, los problemas son infinitos.
- ¿Eso significa que un microscopio o computadora que se rompe no se puede arreglar porque no hay nadie que firme? ¿Y que no se pueden comprar insumos básicos? –le preguntaron.
“Exacto. Y ni siquiera es porque no hay dinero. Porque hay subsidios. Muchos investigadores de la Argentina tienen subsidios del exterior, es decir que en esos casos el dinero está, pero no lo podemos usar porque no hay quien firme”.
“Al margen, la Agencia de promoción da dinero para hacer investigación en veinticinco programas, ese dinero está, pero no tampoco se puede usar porque no hay firma”.
Sueldos congelados
“Como no hay presupuesto, los sueldos se van a mantener congelados, por lo cual se van a licuar en muy poco tiempo. Pero hoy ni siquiera estamos hablando sobre ese tema”, aclaró Gamarnik.
¿Y el presidente del Conicet? “El presidente del Conicet no tiene capacidad de gestión, porque sin presupuesto no puede hacer nada. Y depende directamente del Gabinete”.
- Él debe hablar con alguien, explicarle esta situación… –sugirió un periodista.
“No. No puede porque no hay voceros. No hay nadie con quien hablar. Es una desorganización total. Es una pérdida de coherencia. Yo no entiendo. A eso me refería cuándo me preguntaba cómo las instituciones en nuestro país son tan vulnerables. Hoy no hay interlocutores. No hay nadie pensando ‘bueno, tenemos que recortar, vamos a hacer un plan de acción’. Ni eso”.

Sentir que veinte años…
- Usted trabaja en el Conicet hace 20 años. ¿Alguna vez vio algo así en una gestión?
“¡No, no, no! ¡Para nada! Esto es inédito, porque no sólo hay un objetivo político de recortar, que uno puede estar de acuerdo o no, sino que esto es un caos, es una desorganización total. Una falta de respeto. Una desidia. No hay una idea de nada”.
Consultada sobre cambios que quizás necesitaba el organismo, y acerca de versiones de la prensa hegemónica que hablaban de un mayor presupuesto para las ciencias sociales que para las ciencias duras, la científica dijo: “Por supuesto que había que cambiar cosas. Yo siempre fui muy crítica de cuestiones de funcionamiento. Pero esto es como poner una bomba”.
“No obstante -prosiguió-, se estaba en un proceso de pensar en cómo la ciencia de nuestro país podía resolver los problemas de la sociedad. En esa dirección se estaba. De hecho, en los últimos años se crearon muchas empresas de base tecnológica, se hicieron muchas transferencias. Muchos investigadores se orientaron, en el marco del programa Fonarsec (Fondo Argentino Sectorial)* de la Agencia de Promoción, a la resolución de problemas muy concretos”.
Luego enfatizó: “No se le daba más presupuesto a las ciencias sociales. El presupuesto para las ciencias duras es de entre 10 y 50 veces más, por los equipamientos, insumos, etcétera. Por ejemplo, en nuestro laboratorio, donde se hace virología molecular, se requieren insumos importados, equipamiento pesado, microscopios de alta resolución, y todo eso es carísimo. Pero aparte las ciencias sociales cumplen un rol muy importante en nuestra sociedad y hay que darles su lugar, pero los presupuestos que manejan son muchísimo menores”.

“Para las compras, nosotros tenemos que hacer trámites administrativos que requieren la firma de quien maneja los fondos en representación del gobierno, y no hay quien firme. Entonces, todos estos trámites están frenados”.
“Igualmente ese es sólo uno de los temas. A mí me preocupan muchísimo los despidos de estos últimos días, además de las becas y los ingresos que están completamente congelados. Estos 1.500 profesionales jóvenes que esperaban empezar en enero, tuvieron que atravesar un proceso de un año de selección, y fueron los mejores de los mejores, hicieron una planificación para trabajar en el país, aportar al país, y están en una situación de incertidumbre total porque ni siquiera se pudieron anunciar las becas”.
“Se necesita un presupuesto ya para funcionar en 2024”, remató.
La cruel estrategia de dejar morir al sistema científico lentamente

Mauricio Erben escribió en un artículo que publicó en Letra P que “Las primeras medidas de Milei son estructurales y apuntan a las bases mismas del sistema público, garante y promotor de servicios y derechos fundamentales. En el caso de ciencia y técnica (CyT), se ha concretado la supresión del ministerio, la cancelación de programas, la baja de contratos y la falta de resolución de concursos del Conicet”.
“La medida más impactante es, sin dudas, indirecta: la devaluación del peso junto con la asignación presupuestaria idéntica a la de 2023 resulta en un recorte de recursos sin precedentes en términos reales para el sector público. La estrategia de Milei parece haber evolucionado ligeramente desde la campaña electoral: en lugar de cerrar directamente organismos, los ahogará presupuestariamente y dejará morir de inanición al sistema de CyT”.
“De esta forma, la profecía autocumplida de que la ciencia no aporta nada a la sociedad y los científicos no trabajan se hará realidad al no poder dar continuidad a proyectos, contratar personal, adquirir equipamiento e insumos ni definir políticas para el sistema”.
Privatizar, esa es la cuestión
“La destrucción del sistema público de CyT tendrá un ‘ahorro’ mínimo para el Estado. La inversión pública en CyT en Argentina fue solo del 0,34% del PBI en 2023, un valor muy inferior a la media mundial. Además, la contribución del sector privado a la inversión en CyT en nuestro país ha sido históricamente baja, sin superar el 0,2 % del PBI nacional. En resumen, si el Estado deja de invertir en CyT, no será el sector privado nacional el que lo reemplace”.
“De manera que el objetivo principal detrás de las políticas de Milei radica en su proyecto de privatizar -extranjerizar- empresas estatales, incluyendo aquellas entrelazadas con el complejo de CyT, tal lo expresado en el Decreto de Necesidad y Urgencia y la Ley Ómnibus enviada al Congreso. Empresas como Nucleoeléctrica Argentina (centrales nucleares), el Polo Tecnológico Constituyente, VENG (lanzador satelital), YPF y su empresa de tecnología Y-TEC, ARSAT, Innovaciones Tecnológicas Agropecuarias, INVAP, Radio y Televisión Argentina, Fabricaciones Militares y Télam, entre otras, son estratégicas para el país, realizan aportes enormes a la economía -al PBI nacional en rubros con alto valor agregado-, integran a las pymes en esa cadena de valor, ejemplifican la sustitución de importaciones y la generación de divisas y son lugares con una capacitación de personal de altísimo nivel profesional”.
*Los fondos sectoriales son el instrumento central para la implementación de una nueva generación de políticas que intentan fortalecer la vinculación entre el sector científico y tecnológico con el sector socio productivo a fin de contribuir a la solución de problemas sociales y económicos. El eje conceptual y operativo de los fondos sectoriales está dado por las “Plataformas tecnológicas” las cuales suministran el marco propicio para la reunión de actores públicos y privados quienes en conjunto definen los cursos de acción deseables y factibles que dependen de la investigación, el desarrollo y la innovación para concretar los objetivos de crecimiento, competitividad y sustentabilidad de corto, mediano y largo plazo de su sector de incumbencia.