Por Alejandro Salamone (especial ciclo de entrevistas, 90 Líneas).-
Aquellos que no lo conocen bien podrían suponer, al entablar cualquier conversación con él, que están ante un hombre del campo. Nunca se lo ve apurado, de hablar pausado, de saber escuchar al otro sin interrumpir, de cambiar ideas sin jamás querer sobrepasar o imponer su manera de ver las cosas, de puertas abiertas, de dar una mano sin mirar a quién, de haber acusado fuertes golpes que le asestó la vida -uno muy reciente-, de no guardar rencores hacia nadie, de andar firme y campechano por la vida…
Así podría describir en pocas palabras a José Ramón Arteaga, político platense de raza, peronista y referente fuerte del Frente Renovador, de largo recorrido en labores legislativas y ejecutivas, y recientemente elegido en la Provincia para presidir AUBASA, la empresa a cargo de la importante autopista que une nuestra ciudad con Buenos Aires.
La parsimonia y la tranquilidad que transmite durante la jugosa entrevista a la que amablemente accedió, van de la mano con su rápida capacidad operativa y su compromiso con el trabajo por los demás, porque eso es la política bien entendida, entregar trabajo y más trabajo, ya sea desde la militancia o desde puestos claves, para tratar siempre de mejorar la vida a los demás. Y en eso se enfocó siempre y se enfoca hoy Arteaga, un todo terreno 24 X 7.
Joserra, como lo llamamos cariñosamente quienes lo conocemos, no es precisamente del campo, más bien todo lo contrario, porque nació en 1964 en el hospital Italiano de La Plata y vivió hasta sus 16 años con su familia -su mamá y su papá militante radical muy respetado, y dos hermanos mayores- en pleno centro de la Ciudad, calle 49 entre 10 y 11.
Fue en el año 1980, época de dictadura cívico-militar muy difícil para el país, cuando su padre falleció y por razones que prefiere no recordar o no contar con mayores detalles, vinculadas al terrorismo de Estado y la militancia de su familia en general, se fue a vivir con un grupo de amigos a su querida Villa Elvira, el barrio que lo vio crecer como militante y luego hacer sus primeras armas con funcionario, cuando durante los primeros gobiernos de Julio Alak ocupó el cargo de delegado municipal (1993).
La casa de Joserra, la del centro, fue un ámbito de puertas abiertas que, por su ubicación geográfica, invitaba a muchos amigos, estudiantes secundarios, universitarios y vecinos, quienes se juntaban en almuerzos o cenas para hablar y discutir de política. Eso no era precisamente bien visto por el fascismo imperante luego del golpe de Estado de 1976, que trajo consigo miles de personas asesinadas y desaparecidas.
El año 1981 fue clave en su vida, luego de terminar el bachillerato en el Colegio Nacional de la UNLP, comenzó a estudiar magisterio, se recibió de maestro pero nunca ejerció. También incursionó en la facultad de Periodismo durante los años ´90, cuando aún era la Escuela Superior de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP.
– ¿Cómo fue que te hiciste peronista siendo tu familia radical?
Hablando pausado, responde: «Conocí la realidad de la Ciudad de muy joven a partir de una experiencia social en Villa Elvira, concretamente en un barrio que quiero mucho, Villa Montoro; en los años ´80 hablar de política era de alto riesgo, entonces quienes militábamos lo hacíamos en la clandestinidad, en las universidades, en las fábricas o en movimientos sociales que estaban muy vinculados a la iglesia, que fue un ámbito de contención de muchos jóvenes que estábamos con ganas de participar, discutir de política, de involucrarnos y comprometernos, pero sabiendo que no había vida democrática. Algunos curas de esas parroquias nos mostraban la otra Ciudad, la otra cara, otra realidad distinta a la del centro…Fue ahí que conocí a gran parte de la militancia del peronismo platense que brindaba ayuda a los más necesitados y sin dudarlo me involucré».
En 1980 cuando eligieron a Adolfo Pérez Esquivel Premio Nóbel de la Paz, Arteaga comenzó a trabajar fuertemente con él desempeñandose en el servicio de paz y justicia, así logró que ese organismo de derechos humanos llegara a La Plata. Fue desde ese espacio que Joserra tuvo una ardua tarea cuando retornó la democracia en 1983, pues ayudaba a volver a los exiliados y exiliadas para que intenten una nueva vida en Argentina.
«Yo soy militante, los cargos son circunstanciales», dice el entrevistado, que fue una vez candidato a intendente en 2015 por el Frente Renovador. Su primer puesto laboral fue en la Junta Electoral de la Provincia, y en 1985 ingresó al Concejo Deliberante a trabajar con concejales peronistas. Fue delegado municipal y concejal desde 2001 hasta 2017 de manera ininterrumpida
LA ACTUALIDAD DE LA CIUDAD
La vuelta de Julio Alak a la intendencia luego de imponerse a Julio Garro en la última elección fue un tema abordado durante la entrevista:
«Alak asumió por primera vez en una etapa de La Plata que era la ciudad inconclusa (1991). Estaba todo por hacer, era la ciudad del abandono, las torres de la Catedral sin terminar; el Teatro Argentino parado; la autopista a Buenos Aires inexistente; los accesos eran desastrozos, las grandes avenidas del trazado urbano estaban a la miseria. Julio durante su primera gestión le dio conectividad a la Ciudad, unió el casco fundacional con la periferia, llegó a los barrios con las delegaciones, lo que no se había hecho en toda la historia de La Plata se hizo en esos 16 años de mandato. Para mí hubo un antes y un después de sus intendencias desde 1991 hasta 2007».
Prosigue: «Ahora es otra ciudad, porque también es otro mundo. Si bien todavía hay una etapa de infraestructura que hay que fortalecer en materia de servicios, me parece que el gran desafío que tenemos hoy es articular el gran capital del conocimiento que nos da la UNLP, prestigiosa a nivel internacional, con el mundo del trabajo. Hablo de tecnología, del vínculo del mundo laboral con el del conocimiento, claro este desafío sin abandonar otros temas de enorme importancia como el social o la infraestructura».
«La Plata tiene una posibilidad distintiva y hay que aprovecharla, en cuanto a inversión tecnológica, generación de productos; La Plata exporta y los niveles de ingreso en materia tecnológica han duplicado a lo que genera el cordón hortícola, entonces este es un valor distintivo que sumado al turismo, es algo a explotar por esta nueva gestión»
EL GOBIERNO NACIONAL
– ¿Como considerás que estamos parados los platenses ante el mapa político que no alineó al gobierno Nacional con la Provincia y la Comuna?
«Destruir es muy fácil y muy rápido, y construir lleva mucho tiempo. Lo que ha heredado Alak en La Plata en materia de abandono, de atraso, de deudas, y en recursos humanos que ha sido muy complejo, todo es muy importante y creo no debemos perder de vista lo que dejaron. Por eso, en estos seis meses el intendente está haciendo lo que debe hacer, ordenar.»
«En la historia colectiva de la memoria platense uno recuerda a Julio Alak como el hacedor, y cualquier vecino de La Plata tiene derecho a pensar que ahora tiene que ser igual. Pero hay que ponerlo en un contexto económico y social muy difícil y complejo que, por supuesto, no es el mismo al de sus primeros 16 años de gestión.»
Continúa: «Yo creo que en poquitos meses ya vamos a empezar a ver distintos planes de gran desarrollo y ejecución de obras para la Ciudad y la Región, a pesar de un contexto económico muy caótico y difícil. Lo que ha hecho Javier Milei en estos seis meses es de un retroceso y de un daño en la economía y la producción del país que todavía no sabemos cuando dejaremos de tocar fondo. Volvimos a un esquema impensado en todo sentido, incluyendo los derechos humanos. Sergio Massa siempre planteó la unidad nacional y creo fervientemente que esa es la salida a tanto desastre».
– ¿Que hizo mal el peronismo para que esté gobernando Milei?
«Hay muchas razones, ni una ni pocas…Pero creo que se sintetiza en que el gobierno del Frente de Todos, más allá de la pandemia que fue un hecho traumático para la sociedad mundial y de la sequía en materia de economía, y las consecuencias del endeudamiento en que nos metió Macri a varias generaciones futuras de argentinos, nuestro gobierno no le pudo mejorar y menos resolver los problemas cotidianos a los argentinos, eso es lo que hay que ver claramente, la economía de la gente nunca estuvo bien en esos cuatro años.»
«Me niego a creer que las redes sociales sean tan importantes para la política, el trato personal es fundamental y no considero que el manejo de la tecnología haya influido en el resultado electoral como muchos piensan»
«El peronismo no dejó de caminar los barrios, eso no es verdad, hay mucha militancia que lo hizo y lo hace siempre y tiene presencia. Y no dejó de plantear la necesidad de un Estado eficiente y cercano, pero del dicho a la realidad hay muchas cosas; los ciudadanos de a pie, los vecinos de La Plata, fundamentalmente los trabajadores, no pudieron ver en su poder adquisitivo y de compra una mejora que los sacara del ahogo, la tristeza, porque si bien hubo indicadores altos de actividad económica, no llegar a fin de mes fue un problema».
El final de la entrevista cuesta…Joserra sufrió un duro golpe recientemente con la pérdida física de su compañera de vida, la mamá de sus dos hijos…se quiebra pero sigue con la frente alta y tono pausado, sin rencores: «Estoy agradecido a la vida, si uno está de pie es porque hay mucha gente que abrazó, que estuvo presente. La política hace que uno no esté tanto en la casa, soy un agradecido y la misma vida que tuve la volvería a tener porque las cosas que hice y hago tienen que ver con convicciones, ideales, sueños. Pero siempre que uno le pone la vida a la militancia, a la política, quizás algo resigna. Mi familia ha sido mi sostén en etapas muy duras como 2015, 2016, 2017, la salud de mi hijo…y mi actividad ha tenido consecuencias, lo último fue un golpe muy importante y estamos saliendo junto a mis dos hijos, Tomás y Fermín, que hoy son mi prioridad más allá de seguir con la actividad».
Cierre de nota a cargo de este redactor:
En Argentina la palabra político parece ser mala palabra. Sin embargo cuando se habla de José Ramón Arteaga, al menos este periodista platense, tiene palabras de agradecimiento y felicitaciones por su efectiva trayectoria, su entrega, sus convicciones y su manera de obrar con rectitud, respeto y en beneficio del pueblo. Creo que lo único que puede salvar a este país es la buena política, y con políticos como Joserra.