La crueldad del gobierno de la ultraderecha argentina no tiene límites. Y si esa crueldad cuenta con el respaldo de un exhaustivo estudio sobre el terreno que habitan a diario los sectores más vulnerables y vulnerados de la población y, además, ese relevamiento se realiza a pocas cuadras, a metros de nuestras casas, los discursos que todo lo justifican en los medios hegemónicos de comunicación, en las redes antisociales y en la sarasa del vecino que necesita justificar a toda costa su voto en el balotaje de 2023, se caen como la casa de paja del cerdito en el clásico cuento infantil. Y es que ese discurso, en cualquiera de sus formatos, es de paja.
Este martes 25 de junio de 2024, cerca del mediodía y bajo la consigna «El Hambre es Urgente», la directora del Consejo Social de la UNLP, Inés Iglesias, acompañada por integrantes de organizaciones sociales de la Región La Plata, de la Pastoral Social de la Iglesia Católica, algunos decanos, investigadores, y referentes políticos de la Provincia y el Municipio, encabezó la presentación del Informe 2024 sobre la “Situación de Comedores, Merenderos y Ollas Populares” en nuestra región. Los resultados producen escalofríos. Claro, a quienes traen consigo eso llamado empatía.
El último informe se había llevado a cabo en el año 2022, luego de la pandemia, y fue el más completo de una serie que comenzó en 2018 -cuando el gobierno de Cambiemos comenzó a golpear con fuerza sobre la población más débil- y siguió en 2019.
Así las cosas, el informe aclara que “para revelar información se trabajó sobre la muestra de 2022”, año durante el cual, entre los meses de julio y octubre, se realizó un estudio sobre la situación alimentaria en 73 espacios comunitarios que brindaban comida en barrios populares del Gran La Plata (Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (unlp.edu.ar), aunque en las preguntas a los representantes de las organizaciones sociales se consultó también sobre las variaciones en relación al último semestre de 2023.
El contexto sociopolítico y académico -más que interesante- puede consultarse en el informe completo que ponemos a disposición AQUÍ. Nosotros vamos a arrancar por las conclusiones y, luego, a desagregar las cifras principales…Aunque adelantamos dos para ir poniéndole contexto a la crueldad:
- El trabajo se propuso -entre otras cosas, desde ya- relevar cambios con respecto a 2023 en la composición de los grupos que asisten a los SDA (Sitios de Distribución de Alimentos), registrándose importantes crecimientos en todos los grupos etarios en la mayor parte de los SDA, sobre todo el de los niños, niñas y adolescentes de hasta 17 años, que aumentó un ¡78%!
Sin embargo,
- De los sitios que formaban parte de la muestra 2022 sólo el 62% pudo ser encuestado (pues) la mayoría de los SDA del 38% restante dejaron de funcionar por falta de insumos y/o personal, debido a las bajas en el Potenciar Trabajo/Nexos.
¿Qué tal? Se disparó la demanda social sobre comedores y merenderos pero ahora hay menos comedores y merenderos porque no tienen alimentos. Los galpones de Villa Martelli, como se sabe, siguen repletos de insumos que el ministerio de Capital Humano no mira ni toca. Aún no han presentado el plan de distribución que les pidió la Justicia Federal.
“Tomá nota”, diría Horacio Embón
Dijo el Consejo Social de la UNLP:
- El trabajo realizado en el relevamiento 2024 da cuenta de que comedores, merenderos, ollas populares y otros SDA se encuentran ante una demanda cada vez mayor de alimentos por parte de sus comunidades, mientras su capacidad de respuesta se ve reducida.
- Las políticas provinciales y municipales de atención alimentaria hacia los SDA no alcanzan a compensar el retiro en la participación que, hasta diciembre de 2023, llevaba a cabo el Estado Nacional, dados los efectos en sus presupuestos de las políticas de ajuste estructural puestas en marcha.
- Si bien los merenderos y comedores llevan a cabo estrategias para garantizar los alimentos faltantes, como son la búsqueda de donaciones, intercambio de alimentos y venta de productos elaborados en unidades productivas pertenecientes a las organizaciones sociales, la crisis económica imperante restringe estas posibilidades.
- Los comedores, merenderos y ollas populares cumplen un rol fundamental en lo que respecta a la alimentación en los barrios, pero también al fortalecimiento de los lazos comunitarios en los diferentes territorios, por lo que resulta fundamental la intervención y el compromiso intersectorial en estos espacios.
- Consideramos necesario que el Gobierno Nacional reconozca las consecuencias negativas de las políticas que implementa en territorios, sectores sociales y actividades económicas, y revierta la orientación de las mismas. En tanto éstas continúen, y a los fines de enfrentar sus consecuencias en la seguridad alimentaria, es indispensable avanzar en el fortalecimiento de las redes comunitarias e interinstitucionales.
Como dijo hace décadas Martin Luther King Jr: “Mientras alejamos definitivamente a los malhechores del camino de Jerusalén a Jericó, debemos seguir siendo el buen samaritano”.
¿Dónde están?
“Casi la totalidad de los SDA están ubicados en barrios populares del aglomerado, territorios densamente poblados que registran problemáticas significativas en relación con las condiciones socioeconómicas, sin acceso regular a dos o más servicios básicos (red de agua corriente, red de energía eléctrica con medidor domiciliario y/o red cloacal) … La mayor concentración se da en las localidades de Melchor Romero y Villa Elvira, que junto con Los Hornos nuclean casi el 50% de los espacios relevados”.
comedores platenses
¿Cuándo nacieron?
“Más de la mitad de los SDA (55%) fueron creados a partir de 2015; más de un tercio (38%) entre 2001 y 2014, y los restantes en el periodo previo a 2001”.
¿A cuántas personas asisten en promedio?
“La muestra da cuenta de un predominio de espacios a los que asisten entre 100 y 200 personas regularmente (más del 40% del total relevado), siendo algo menor la proporción de merenderos, comedores y ollas que asisten a menor o mayor cantidad de personas (32% y 27%, respectivamente)”.
comedores platenses
El aumento de la demanda no reconoce edad, pero…
“En cuanto a las edades, la encuesta se propuso también relevar cambios con respecto a 2023 en la composición de los grupos que asisten a los SDA, registrándose importantes aumentos para todos los grupos en la mayor parte de los SDA:
- Niños, niñas y adolescentes de hasta 17 años: +78%
- De 18 a 29 años: +48%
- De 30 a 50 años: +50%
- 50 años y más: +48%”
Menos servicios por falta de insumos
“Al ser consultados por los cambios en relación con la situación que se presentaba en 2023, los referentes de los sitios relevados señalan en su mayoría (más del 50%) una disminución en cuanto a los días de atención, con un importante peso también de SDA que han tenido que recortar servicios brindados y turnos ofrecidos, dando cuenta de una disminución de estos servicios en más del 30% de los SDA.
De acuerdo a la información registrada en los talleres realizados con referentes de organizaciones esto se debe:
- Por un lado, al aumento de la demanda por parte de la población a la que asisten los SDA, que ha visto resentido el acceso a alimentos vía compra en el mercado, debido al incremento de precio de los mismos.
- Por otro lado, al deterioro en las condiciones de la asistencia pública, fundamentalmente del Estado Nacional, que suspendió envíos de alimentos y fondos a los SDA.
Es de destacar que pese a ello, en muchos SDA las organizaciones sociales lograron mantener estable la cantidad de servicios y turnos, y hasta en algunos casos han logrado incrementarlos para poder dar respuesta a la demanda creciente. También es importante destacar, como ya se ha mencionado, que una cantidad no menor de SDA debieron cerrar sus puestas o suspender el funcionamiento por falta de alimentos e insumos”.
Menos alimentos y menos proteínas, vitaminas y minerales
“A partir de los datos recabados se infiere que hay un menor aporte de proteínas, vitaminas y minerales, lo cual impacta en el estado nutricional de las personas que asisten a los comedores y merenderos ya que el organismo necesita estos nutrientes para un crecimiento y desarrollo adecuados.
Este déficit pone seriamente en riesgo la salud y el desarrollo de la población, sobre todo de los niños, niñas y las personas gestantes”.
comedores platenses
Finalmente hay que destacar el impacto negativo que trajo aparejado en comedores, merenderos y ollas populares la reducción y modificación del programa Potenciar Trabajo (que provocó) la desafectación de muchos trabajadores y trabajadoras, implicando un retroceso respecto a las condiciones de funcionamiento de los SDA relevadas en la encuesta 2022 … El 46% de los espacios tuvo una merma en la cantidad de trabajadores rentados.
comedores platenses
Para la Iglesia Católica, “Madres de la Patria”. Para la extrema derecha argentina, “extorsionadores”. La única verdad es la realidad: HAY HAMBRE EN LA PLATA.
