The sandman: la adaptación del mejor comic de la historia

The sandman

The sandman.- En el mundo existen prejuicios de todo tipo, pero uno de los más malévolos es aquel donde se cree que los comics son un medio infantil, quienes conocen de dicho arte saben que eso es un error garrafal. Especialmente desde la década de los 80, las historietas lograron plasmar en el papel historias profundas y complejas, crear un lenguaje adulto que logró hacer florecer su industria con grandes autores como Alan Moore, Frank Miller y quien nos interesa en este caso, Neil Gaiman.

Hace unos días Netflix estrenó la adaptación a serie de la obra más famosa de Gaiman, The Sandman. Una obra compleja que siempre ha esperado su adaptación y que tuvo que esperar casi 40 años este momento. La historia podría decirse que está protagonizada por Dioses, algo muy común en la obra del autor, pero que en esencia no narra la vida de deidades sino cómo estos materializan los conceptos que las personas tienen sobre ellos.

De este modo, la historia cuenta sobre los eternos, unos dioses que representan conceptos tales como la muerte, el destino o los deseos. El protagonista es quien representa los sueños, también llamado Morfeo, quien es aprisionado por un ocultista que tras un ritual lo captura y roba los objetos que le dan poder. Esto hace que su prisión se extienda por 100 años y que su reino se derrumbe por su ausencia.

El autor Neil Gaiman estuvo involucrado en el proyecto, junto a los guionistas David Goyer (que coescribió la trilogía de Batman de Christopher Nolan) y Allan Heinberg. Hay una importante fidelidad a la obra original llevada a un formato de serie de Streaming, posiblemente su mayor virtud sea mantener la esencia onírica del comic, donde constantemente se está pasando del mundo real (llamado mundo de la vigilia) y el reino de los sueños.

De esta forma, la adaptación se puede decir que logra llevar a la pantalla una historia fantástica profundamente oscura que por momentos cae en el terror. De allí que me detenga particularmente en el episodio número cinco, donde uno de los antagonistas utiliza uno de los poderes del rey de los sueños para manipular a las personas que están en una cafetería. Al principio del capítulo hay un clima muy agradable en la escena, pero a medida que el metraje avanza la cosa se vuelve cada vez más oscura hasta llegar a un lugar de un absoluto aquelarre, donde los personajes se comienzan a matar y mutilar entre sí. Una enorme creación de ambiente del horror.

The sandman

Es que al igual que en la historia original, Sandman está dividida en pequeños cuentos que hacen una obra más grande, sobre la importancia de los sueños como motores de la vida humana, y de las pesadillas como señales de alerta para todo lo que tememos como personas. De allí historias como la del ocultista que secuestra al protagonista y luego su hijo, la del hombre inmortal que visitaba a Morfeo en el mismo lugar cada 100 años o la representación de la muerte como una joven amigable que llega a conducir a las almas al más allá.

Sin dudas la serie como adaptación funciona, pero al verla uno puede pensar que esta historia hubiera necesitado el presupuesto de las películas de Marvel para haber tenido todo el potencial que podría. También tiene ciertos vicios propios de las series de Netflix como la inclusión forzada, la mitad de los personajes del comic fueron convertidos en mujeres o se los mostró como personas LGBT. No digo que esté mal, pero arruina un poco pensar que teniendo tan buena historia entre manos quieran meter la corrección política de una multinacional.

Obras como Sandman hicieron que los comics puedan rivalizar con la literatura como medio, ya sabemos en Argentina que obras notables como Mafalda o El Eternauta han reflejado nuestra realidad como más claridad que muchas publicaciones de los más notables escritores. En este caso aquella novela gráfica nos llevó a un mundo del sueño donde en el fondo los dioses no eran más que nuestros propios miedos, deseos o ilusiones rigiendo nuestras vidas por encima de cualquier cosa.

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