La piel de gallina. Ni más ni menos. Eso es lo que le pasa a cualquier mortal, al ver el video de cómo los pobladores de Alvear, Corrientes, despidieron en las últimas horas a los tres bomberos voluntarios de Ensenada, que combatieron junto a colegas de toda la Provincia, los incendios forestales que tenían en vilo a esa Provincia y que, gracias al accionar de estos verdaderos héroes, ya están prácticamente controlados.
El comandante general Leonardo Curciarello (director de operaciones), José Luis Aparicio y Leandro Paz, son los tres bomberos voluntarios ensenadenses que tendrán su merecido recibimiento en la Región, cuando este domingo a las 8:30 de la mañana, arriben a la zona de diagonal 74, bajada de la Autopista a Buenos Aires, donde llegará una enorme caravana con colegas, amigos y, por supuesto, sus familiares.
Estos efectivos estuvieron alojados en Alvear, un pueblo ubicado al oeste de Corrientes y que cuenta con unos 7.000 habitantes. La emoción se hizo carne cuando todos los vecinos, con banderas argentinas, maquetas de edificios emblemáticos de Corrientes, de Capital Federal y otras provincias, como el Cabildo y la Casa de Tucumán, salieron a las calles para saludar y agradecer a los bomberos, quienes no pudieron evitar las lágrimas de emoción.
Fueron unos 15 días durante los que los efectivos combatieron los incendios forestales y recién en las últimas horas, pudieron regresar sabiendo que ya no quedaban prácticamente focos ígneos activos, según informaron fuentes del cuartel a 90lineas.com.
«Ahora vamos a ir a recibirlos como se merecen, los escoltaremos hasta Ensenada tocando la sirenas, son verdaderos héroes que hacen patria en el lugar donde hay que estar», expresaron allegados y amigos que se comunicaron este medio.
En Alvear hubo un acto en la plaza central y la comunidad le entregó diplomas de honor tanto a los ensenadenses como a efectivos de otros distritos bonaerenses.
Los bomberos locales arribarán este domingo en una camioneta Hilux 4X4 de «ataque rápido», que lleva un kit forestal detrás, que fue con la que combatieron los incendios en Corrientes. En rigor, de la Federación bonaerense fueron más de 30 vehículos, contando los cisternas, el camión de comando de incidentes y las camionetas de «ataque rápido».
De la Provincia de Buenos Aires ya regresan todos, porque no quedó ningún foco activo en la zona dónde se desempeñaban, según se observó en la recorrida aérea de las últimas horas, indicaron las fuentes del cuartel de Ensenada.
EN GUARDIA
A pesar del respiro que trajo la lluvia de esta semana, los brigadistas que combaten los incendios forestales en Corrientes continúan en guardia controlando, observando, los focos que fueron afectados, mientras esperan que nuevas precipitaciones los ayuden a combatir algunos que todavía siguen activos.
El director del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF), Alberto Seufferheld, afirmó en diálogo con Télam que «si bien las lluvias de esta semana trajeron alivio, estamos desplegando mucha gente porque hay que hacer guardias que impiden que algunos focos se vuelvan a encender y hay que atacar algunos a los que las lluvias no los afectaron».
En la base operativa que la fuerza conjunta de organismos nacionales y brigadas forestales de distintas provincias montaron hace dos semanas en una escuela rural de la localidad correntina de San Miguel, las actividades ya no presentan el vértigo de jornadas previas a las lluvias y puede verse a grupos de brigadistas lavando a mano sus uniformes ennegrecidos por extensos e intensos días y noches de combate entre las llamas.
Muchos de ellos aprovechan esta ventana de descanso para comunicarse con sus familias a través del sistema montado por la empresa estatal de telecomunicaciones Arsat que provee de señal al campamento. Otros, como los ensenadenses, ya emprendieron la vuelta.
«De acuerdo a lo que nos mostraron las imágenes satelitales que analizamos está mañana, sobre los puntos de calor en el área se organizaron sobrevuelos para evaluar fuegos en la zona de Itatí, cerca de la capital provincial, cerca del Parque Nacional Mburucuyá, en Lomas de Vallejos y también en Galarza dónde es probable que algún foco se haya reactivado», detalló Seufferheld sobre la situación en Corrientes donde el fuego ya consumió 900 mil hectáreas.
El funcionario explicó que ayer se hicieron sobrevuelos en las zonas de San Alonso y El Socorro, donde la situación permanece «tranquila».