-¿Vos sos Wado? Soy hija de un militar que asesinó a tu mamá

La tremenda experiencia de Eduardo Wado de Pedro cuando, de manera sorpresiva, se le cruzó la hija de uno de los asesinos de su madre. “¿Si creo en el perdón de las personas? Por supuesto”, aseveró. El colectivo “Historias Desobedientes-Familiares de genocidas por la Memoria, la Verdad y la Justicia” emitió un extenso comunicado apoyando a De Pedro y resaltando su actitud

Wado de Pedro (crédito imagen: infobae)

wado

De la Redacción de 90 Líneas.-

“Tengo una experiencia muy linda. Estaba caminando por la calle Las Heras y me para una chica y me dice: “¿Vos sos Wado, no?”. Le digo que sí y ella dice “soy hija de un militar” (me dice el nombre). Justamente es uno de los militares que asesinaron a mi madre. Entonces, cuando me dijo “soy la hija de”, me quedé en shock. Me dice “quedate tranquilo, te quiero pedir perdón, porque yo tengo a mi padre en la cárcel, lo puedo ir a visitar, pude pasar las fiestas con él, y sé que vos no”.

La impactante historia se la contó Eduardo Wado de Pedro a un grupo de 13 jóvenes de entre 18 y 30 años que lo entrevistaron para la sección La Entrevista Informal de Infobae, publicada el pasado 27 de mayo.

Acto seguido, una chica del panel le preguntó:

– ¿Crees en el perdón?

– ¿En el perdón de personas? Por supuesto –respondió.

Luego de esa publicación, el colectivo Historias Desobedientes-Familiares de genocidas por la Memoria, la Verdad y la Justicia, conformado precisamente por familiares de represores y asesinos de la dictadura cívico-militar (1976-1983) que repudian públicamente el rol de sus padres durante el terrorismo de Estadoapoyaron mediante un comunicado a Wado de Pedro.

«Desde Historias Desobedientes-Familiares de genocidas por la Memoria, la Verdad y la Justicia acompañamos las declaraciones del compañero (Eduardo) Wado de Pedro, Ministro del Interior de nuestro país y víctima directa del Terrorismo de Estado, en las cuales relata el encuentro con la hija de uno de los victimarios de su madre», dicen en el comunicado.

Este colectivo, en un momento cobró gran notoriedad por la participación en sus filas de la hija de Miguel Etchecolatz, director de Investigaciones de la policía bonaerense y mano derecha del general de brigada Ramón Camps durante la dictadura.

Los centros clandestinos de detención a cargo de Etchecolatz concentraron la mayor parte de los detenidos desaparecidos del país. Fue responsable, entre los casos más emblemáticos, de la conocida como “La Noche de los Lápices». En 2006 fue condenado a prisión perpetua. Luego, el testigo central del caso, Jorge Julio López, desapareció. Hasta hoy.

Mariana Dopazo se define como ex hija de Miguel Etchecolatz: «No le permito más ser mi padre» (Crédito imagen: P12)

“No le permito más ser mi padre”

Mariana Dopazo, la hija del genocida, durante una entrevista que le realizó la periodista Ana Cacopardo y que publicó Página 12 el 2 de julio de 2022, declaró: “No le permito más ser mi padre”.

Volviendo al tremendo e inesperado encuentro de Wado de Pedro con la hija de uno de los militares que ultimó a su madre, el colectivo Historias Desobedientes resaltó este martes 30 de mayo «el efecto reparador del encuentro entre familiares de genocidas y víctimas de la dictadura», en apoyo a las declaraciones del ministro del Interior y precandidato a la presidencia de la Nación por el Peronismo.

“Gran humanidad, empatía, inteligencia”

«Creo que Wado es un líder natural por su gran humanidad, empatía e inteligencia. Su militancia desde muy joven y su formación política hablan de un trabajo de mucha valentía y de mucho amor que hizo a partir de trabajar y repensar su propia historia”, dijo Analía Kalinec, referente de Historias Desobedientes.

La organización amplió: «Entendemos y vivenciamos el efecto reparador del encuentro entre familiares de genocidas y víctimas de la dictadura, cuando se reconoce el daño generado y la necesidad de justicia«.

Aclararon que «estos encuentros son siempre muy respetuosos y cuidadosos, en general se dan por iniciativa de las víctimas que reconocen en nuestro posicionamiento algo reparador o que hace bien».

«El surgimiento de Historias Desobedientes se debe al alto nivel de conciencia social que alcanzó nuestro país a partir de la lucha de un pueblo que nunca dejó de reclamar justicia (lucha encabezada por las Madres y las Abuelas de Plaza de Mayo)»

Consideraron que gracias a la «conciencia colectiva» que les dio «la búsqueda incansable» de los organismos de derechos humanos, su «incesante lucha contra la impunidad» y la «práctica permanente de la memoria», se puede «construir una sociedad unida».

Analía Kalinec contó que al escuchar las declaraciones de De Pedro «quedaron muy conmovidos y movilizados».

“Historias Desobedientes-Familiares de genocidas por la Memoria, la Verdad y la Justicia”, en una marcha organizada por los organismos de derechos humanos (Crédito imagen: DW)

Señaló que esa emoción es efecto también del «camino» que vienen realizando al vincularse con víctimas de sus padres o familiares.

Su padre, Eduardo Kalinec, fue un represor que actuó en los centros clandestinos del circuito Atlético-Banco-Olimpo (ABO), condenado a cadena perpetua en 2010.

También expresó que «desde Historias Desobedientes reivindicamos la lucha de los organismos de derechos humanos, una lucha de la que Wado (de Pedro) también es parte, y valoramos las políticas públicas impulsadas desde los gobiernos de Néstor (Kirchner) y Cristina (Fernández)».

La historia de Wado de Pedro

Eduardo de Pedro nació en la ciudad bonaerense de Mercedes el 11 de noviembre de 1976. Tiene 46 años. Su familia residía en el barrio porteño de Floresta. Su papá, Enrique de Pedro, estudiante de Derecho y militante de la Juventud Peronista, fue asesinado en abril de 1977. Tiempo después, un “grupo de tareas” de la dictadura halló la casa de la madre, Lucila Adela Révora. El 1º de agosto de 1978 fue secuestrada y desaparecida. Antes, según contó Wado, lo protegió de una balacera poniéndolo en la bañera y tirando su cuerpo encima.

Lucía Adela Rébora fue secuestrada cuando estaba embarazada de ocho meses. Antes salvó la vida de Wado, que entonces tenía dos años. Eduardo de Pedro fue raptado en un Falcon Verde. Un año después lo entregaron a su familia (Crédito imagen: Perfil)

En el informe Nunca Más elaborado por la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep), su madre, embarazada de ocho meses, aparece como desaparecida. Pero según el testimonio de Susana Leonor Caride y de Omar Eduardo Torres en la causa 13/84, fue asesinada durante un operativo llevado a cabo por un grupo de tareas formado por miembros del Ejército, de la policía, del Servicio Penitenciario y de Gendarmería Nacional en su casa del barrio Vélez Sarsfield.

A Eduardo de Pedro, que tenía dos años, lo dejaron al cuidado de unos vecinos. Pero a la noche lo vinieron a buscar en un Falcon Verde y se lo llevaron. La familia de la madre de Wado, al enterarse del secuestro, se puso en contacto con un comerciante de la ciudad de Mercedes que conocía a Carlos Guillermo Suárez Mason, un militar luego detenido por delitos de lesa humanidad, para recuperar al niño. El 13 de enero de 1979, Eduardo fue entregado a un sacerdote de la ciudad, quien lo entregó a su vez a la familia. Fue criado por su tía, Estela Révora, junto a su marido, Javier Ustarroz, en Mercedes.

Fuentes consultadas: Infobae, Agencia Télam, Wikipedia, Página 12

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