El platense Thiago Tirante (19 años) llegó a su primera final en un torneo de categoría Challenger del circuito ATP Tour celebrado en Lima, Perú. Y en esa instancia fue derrotado esta tarde por el experimentado colombiano Daniel Galán 6-1, 3-6 y 6-3.
Nuestro vecino del barrio de La Cumbre, quien se formó desde muy chico en el club de sus abuelos y fue entrenado por sus tías Vanesa y Valeria Tirante, tuvo hoy su primera prueba fuerte en el circuito profesional.
Nunca es fácil jugar una final y esta vez no fue la excepción, más aún contra el experimentado Daniel Galán de Colombia.
El primer set comenzó auspicioso para Thiago que comenzó quebrando el saque de Galán quien no tardó en reponerse y mostrar su chapa de favorito.
Claramente esta final pesaba para el platense, que cedió rápidamente el set inicial 1-6 debido a que no podía conectarse con sus armas principales, el saque y el drive.
El Colombiano no hizo mucho para llevarse el primero pero eso le jugó en contra en el segundo, donde ahora sí, apareció el Thiago que todos conocemos.
A fuerza de primeros saques, derechas potentes y un gran despliegue físico, Tirante supo doblegar a Galán que en ese momento supo realmente contra que jugador se enfrentaba, pero era tarde, se le escapaba el segundo set a manos del platense por 6-3.
Ya en el tercero, pudimos ver un partido muy parejo, donde Thiago se mantuvo metido en el partido hasta el ultimo punto y el colombiano tuvo que estar mas fino para llevarse esta final por 6-1/3-6 y 6-3 y así coronarse campeón del torneo.
Más allá del resultado, el entrenado por Vanesa Tirante y físicamente por Martiniano Orazi (ex Del Potro y actual entrenador físico de Diego Schwartzman) demostró a todos, pero fundamentalmente a sí mismo, que puede lograr esto y mucho más porque tiene con qué.
De esta manera, este gran representante que tiene nuestro país y en particular nuestra ciudad, se está convirtiendo en un referente para tantos niños y niñas que practican este gran deporte, donde con solo 19 años y entrenando “en casa”, también nos llega la señal que si uno se lo propone, todo es posible.