Llora la música

Si te preguntan qué es un rockero argentino, podés responder con un sinónimo: Rodolfo García. Tan sencillo y buen tipo como aparenta, a los 75 años y en plena actividad, una de las personas más queridas y respetadas en el ambiente musical sufrió un ACV y, pese a ser intervenido quirúrgicamente, quedó en estado irreversible de muerte cerebral. Baterista, vocalista y cofundador de Almendra, Aquelarre, Tantor, Spinetta y Los Amigo (así, sin s) y otras bandas, fue convocado por Peteco Carabajal, Riff, Víctor Heredia, Pedro y Pablo y Lito Nebbia como colaborador. El miércoles 29 de abril, los parches enmudecieron

Rodolfo García

“Quiero presentarles a un músico que es como un padre musical desde siempre, y siempre me va a guiar, porque es una persona derecha como pocas yo conozco, y a quien amo: Rodolfo García, batero de Almendra”.

Así presentó Luis Alberto Spinetta a Rodolfo García antes de interpretar, el Flaco en guitarra y Rodolfo en acordeón, un instrumento que “heredó” de su padre, La miel en tu ventana, un tema de Almendra que nunca fue grabado.

Luis y Rodolfo fueron mejores amigos. Se amaban con el alma. Y quizás pronto vuelvan a cantar a dúo, sobre una enorme y blanquísima nube, Campos verdes, uno de los simples que primero pegaron de Almendra y donde, como en la mayoría de las canciones de la mítica banda, García aportó su voz desde atrás de los bombos y platillos.

Se conocieron de muy pibes. Rodolfo iba al industrial Manuel Belgrano de Floresta mientras laburaba en un taller mecánico. Luis cursaba en el Instituto San Román de Nuñez. “Yo era batero de Los Larkins, y cuando conocí al Flaco me di cuenta de que era distinto, veía cosas que los demás no veíamos. Lo invité a la banda y el resto me dijo que no porque era muy chico. Y sí, nosotros teníamos 17 y él 13, y a esa edad es un montón”, contó García en una extensa y excelente entrevista con Mariano Del Mazo, en octubre de 2019.

Pero Rodolfo y Luis estaban predestinados a no separarse jamás. Por eso, al poco tiempo, con Emilio Del Guercio y Edelmiro Molinari formaron Almendra.

¿Se puede decir que Rodolfo García (nacido el 23 de febrero de 1946 en la ciudad de Buenos Aires) cofundó Almendra con Spinetta y grabó con él su último álbum? Absolutamente.

Es que el 4 y 5 de marzo de 2011, Spinetta, García y Daniel Ferrón (bajista, guitarrista y cantante que acompañó al Flaco en varios discos solistas y que en 2017 formó con Rodolfo la banda Jaguar), grabaron Spinetta y Los Amigo en los estudios La Diosa Salvaje, propiedad del Flaco.

Varios temas eran del “dueño de casa” y otros nacieron de sesiones de jams (cuando un grupo de músicos tocan de manera improvisada, algo que está en el ADN del jazz, por ejemplo). La grabación quedó. Luis se fue de este mundo el 8 de febrero de 2012. Y el 27 de noviembre de 2015, los hijos del Flaco presentaron el esperado primer álbum póstumo de su padre junto con Rodolfo y Daniel. A las canciones originales se añadieron los infaltables teclados del Mono Fontana, músico casi inseparable de Spinetta durante toda su etapa solista.

Si bien Almendra duró dos años, marcó a fuego a sus integrantes “hasta con lo ético”, como contó Rodolfo (ver siguiente video).

Llegó la separación. Rodolfo no quería. Pero lo cierto es que se dio y nacieron tres bandas emblemáticas del rock argentino: Aquelarre, con García y Emilio Del Guercio; Pescado Rabioso con Spinetta, y Color Humano con Edelmiro Molinari.

Aquelarre, al igual que sus bandas-primas, terminó de romper los moldes de la música nacional con una mezcla de jazz-rock, rock duro y virtuosismo que chocaba de frente con la entonces llamada música comercial.

El impresionante riff de (Canto) Desde el fondo de las ruinas y Violencia en el parque, prohibida luego por la dictadura cívico-militar, son clásicos de la música argentina.

En la entrevista con Del Mazo y sobre la época de Almendra, Rodolfo comentó: “Eramos locos enamorados de lo que estábamos haciendo. Nos preguntábamos ¿a alguien le gustará esto?. Pensá que, en esa época, un tema empezaba diciendo “figúrate que pierdes la cabeza” (…) Todos tocaban en los bailes de los clubes, nosotros decíamos que teníamos que tocar en un teatro. El manager nos quería matar. Nadie hacía teatros entonces. No éramos soberbios, pero estábamos convencidos al menos de lo que no queríamos. No nos gustaba El Club del Clan; nos gustaba Piazzolla, la bossa, el folklore vocal, Los Beatles, Los Gatos… El Flaco puntualmente estaba muy copado con Tanguito, al punto de que Almendra estuvo a un paso de grabar con él”.

Y sí, Almendra tenía todo preparado para ser la banda de Tanguito, porque a Luis sus temas le parecían buenísimos. “Pero Tanguito hizo todas las cagadas posibles. Estaba muy quemado. Era un bardo caminando”, recordó Rodolfo.

Aunque muchos no lo registren , García pasó por Pescado Rabioso. Es que al tercer disco de la banda, Artaud, si bien Spinetta lo lanzó como un álbum de Pescado, el grupo ya se había disuelto y fue grabado por Luis y amigos. Entonces, ¿quién otro en la batería?

En 1975 Aquelarre desembarcó en una España oscura. Ese mismo año murió el dictador Franco. Nadie hacía rock en español. “Me acuerdo que lo fuimos a ver al Mariscal Romero y nos dijo “perdón, si es en castellano, no es rock. El rock es en inglés”. Nosotros le respondimos: “Mirá, llamalo como quieras. Pero nosotros cantamos en español y hacemos rock”. Unos años después el Mariscal Romero vino a la Argentina con Barón Rojo, banda emblemática del rock en español”, recordó Rodolfo, quien contó que tocaron en vivo en la televisión española (RTVE).

Entre Almendra y Aquelarre, Rodolfo García tocó con Litto Nebbia en Nebbia’s Band. Hasta que en 1978 formó Tantor, un grupo de rock progresivo que incluso tenía temas instrumentales. Duró hasta 1983.

Luego de la reunión de Almendra, en 1980, tras más de 10 años como uno de los dos bateristas insignia del rock argento (junto a Oscar Moro), Rodolfo se compró su primera casa. En el barrio porteño de Villa Ortúzar. Se caía a pedazos y la remodeló ladrillo a ladrillo, peso a peso. Y allí se quedó.

Tocó con Pedro y Pablo en los 80, con Víctor Heredia, formó otras bandas como La Barraca, PosPorteños y la mencionada Jaguar. Cuando Michel Peyronel, baterista de Riff, estuvo tres meses internado, Pappo lo llamó a Rodolfo y, al presentarlo en el primer recital, la ovación del difícil público de Riff fue tal que el propio “Carpo” se sorprendió, como se escucha en el siguiente video.

La humildad de Rodolfo García quedó demostrada por enésima vez cuando fue convocado por Peteco Carabal y Jacinto Piedra para conformar la banda que grabaría el disco Transmisión Huaucke. “¡Tocar percusión con santiagueños! ¡Santiago del Estero es la patria de los percusionistas! Pensaba que no iba a dar la talla. El que me sacó la inseguridad fue Norberto Minichilo. Un día me lo encuentro en la calle y le cuento mis dudas. Me dice: ‘¿Sos boludo? Podrían haber llamado a cualquier santiagueño, podrían haber llamado a Domingo Cura, pero te llamaron a vos. ¡Les interesa tu sonido!’, me dijo. Ahí me relajé”, le relató a Del Mazo.

Escribió en y quedó (casi contra su voluntad) como director de la mítica revista El Expreso Imaginario; hizo radio junto a Pedro Saborido; en 2014 había sido nombrado Director Nacional de Artes durante la segunda presidencia de Cristina Fernández.

A la derecha de la foto, Rodolfo García (La Voz del Interior)

“Un tipo de un corazón enorme y una sonrisa de luz. Un tipo que laburó con amor y dedicación por el arte. Un pedazo de nuestra historia” (Franco Luciani). “¡Este disco de Aquelarre me acompaña e inspira desde 1976! Gracias Rodolfo García por tanto arte. A tu espíritu, que aún está cerca, todo el Amor y que Dios te sostenga en su palma” (Palo Pandolfo). “Fuerza Rodolfo. Tus amigos, colegas y admiradores rezamos por vos, por lo gran persona y necesidad total, en lo personal, de agradecimiento” (Leo García). Los tuits se suman de a cientos, de a miles, y seguirán creciendo por este brillante músico y mejor persona. ¿El Flaco lo estará esperando con el mate amargo, el banderín de River Plate (otra pasión compartida), una guitarra y un acordeón? ¿O una batería? Sólo Dios lo sabe.

Aquelarre, una banda que hizo historia tras la separación de Almendra. Rodolfo García (derecha), Emilio Del Guercio (arriba), Héctor Starc y Hugo González Neira (La Nave del Rock Argento)
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