Divulgarán en las escuelas el legado de Ana Frank

En el marco del Día de los adolescentes y jóvenes por la inclusión social y la convivencia contra toda forma de violencia y discriminación, que se recuerda cada 12 de junio en conmemoración del natalicio de Ana Frank, el Ministerio de Educación de la Nación firmó un convenio de colaboración con el Centro Ana Frank

El Centro Ana Frank (foto: ministerio de Educación)

El titular de la cartera educativa nacional, Nicolás Trotta, y el director del Centro Ana Frank, Héctor Shalom, celebraron un acuerdo que tiene por objetivo desarrollar de manera conjunta proyectos orientados a divulgar el legado de Ana Frank, profundizando sobre procesos que favorezcan la inclusión social -en especial con adolescentes y jóvenes- y los desafíos frente a la violencia y la discriminación en todo el territorio nacional.
Además, el Gobierno nacional asumió el compromiso de avanzar en la política de Educación y Memoria, para promover la enseñanza de la historia reciente mediante la elaboración y puesta a disposición de materiales y acciones de capacitación docente a nivel nacional. También, se prevé la creación de un recorrido virtual al museo de Ana Frank en un trabajo conjunto con Educar S.A.
Entre otras acciones que fija este acuerdo, se destacan: la realización de exposiciones itinerantes en todo el país, en distintos formatos; el desarrollo de concursos literarios y capacitaciones para las y los jóvenes; la distribución en bibliotecas escolares de material bibliográfico y/o publicaciones sobre Ana Frank; la difusión del día 12 de junio como “Día de los adolescentes y jóvenes por la inclusión social y la convivencia contra toda forma de violencia y discriminación», en honor al natalicio de la escritora mundialmente conocida.
Asimismo, la obra El diario de Ana Frank será uno de los títulos que acompañará las colecciones literarias de primaria, secundaria y jóvenes y personas adultas del Plan Nacional de Lecturas, que pronto llegarán a las escuelas de todo el país.
Junto con el Instituto Nacional de Educación Tecnológica (INET) se llevará adelante una muestra itinerante, con la reproducción de elementos característicos de su casa. Se utilizarán las Aulas Talleres Móviles para realizar la exposición, que contará con objetos de la época, una réplica de su vivienda, y en particular de su cuarto, lugar en el cual redactó su diario. El objetivo de hacerlo en un tráiler es poder llegar a diversos puntos de todo el país y poner en valor esta temática, reafirmar la memoria, la búsqueda de la identidad, la inclusión, y diversas cuestiones que el Ministerio de Educación está trabajando desde sus áreas.
Por otra parte, como todos los años, desde el Programa Educación y Memoria se ponen a disposición una serie de recursos y actividades destinadas a las y los estudiantes de los niveles primario y secundario que pueden ser consultadas a través del portal Educ.ar, dependiente del Ministerio de Educación.
¿QUIEN FUE ANA FRANK?

Hija de Edith Hollander y Otto Frank, Ana Frank nació en Fráncfort del Meno, Alemania, en 1929. Tenía una hermana mayor llamada Margot. Debido a las medidas antijudías desplegadas en Alemania desde el ascenso del nazismo en 1933, la familia Frank tuvo que exiliarse a Amsterdam, Holanda. Al igual que millones de judíos y judias de Europa, Ana sufrió el odio y la discriminación que llevaron a la muerte a una parte importante de este pueblo .

El titular de la cartera educativa nacional, Nicolás Trotta, y el Director del Centro Ana Frank, Héctor Shalom

En Amsterdam su padre se dedicaba a trabajar en su fábrica de pectina (una fibra presente de manera natural en las frutas, que se utiliza en la industria de la alimentación) hasta que los nazis invadieron la ciudad. A partir de julio de 1942, la familia completa se vio obligada a vivir escondida en la llamada «Casa de Atrás», un escondite dentro de las propias oficinas de la fábrica de Otto. Durante este confinamiento, compartieron el escondite con Hermann van Pels —quien trabajaba con Otto—, su esposa Auguste Röttgen, su hijo Peter van Pels y Fritz Pfeffer, amigo de la familia Frank.

Ana tenía un fuerte anhelo de ser periodista y escritora por lo que, a sus trece años, sus padres le regalaron un diario íntimo al que llamó Kitty, en donde ella escribía sobre sus sentimientos y emociones.

En su diario escribió:

«Cuando escribo se me pasa todo, mis penas desaparecen, mi valentía revive. Pero entonces surge la gran pregunta: ¿podré escribir algo grande algún día? ¿Llegaré algún día a ser periodista y escritora? ¡Espero que sí, ay, pero tanto que sí! Porque al escribir puedo plasmarlo todo: mis ideas, mis ideales y mis fantasías.»    (5 de abril 1944)

El 4 de agosto de 1944 los Frank fueron delatados a través de una denuncia anónima; fueron apresados y luego enviados a campos de concentración y exterminio. Ana pierde la vida junto a su hermana en el campo de Bergen-Belsen por haber contraído tifus y su madre fallece en Birkenau; sólo su padre logra sobrevivir al Holocausto.

Miep Gies y Bep Voskuijl, dos de las personas que protegieron a los Frank mientras estuvieron escondidos, encontraron y guardaron el diario de Ana y se lo entregaron a su padre Otto una vez finalizada la guerra. El 25 de junio de 1947, Otto Frank publicó la primera edición de El diario de Ana Frank con la esperanza de que la lectura de las palabras de su hija contribuyera a la toma de conciencia sobre la discriminación, la xenofobia y el racismo.

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