Kilos de oro ¿quien sabe cuántos kilos?; es que nunca nadie dejó nada en claro, ni la cantidad ni a dónde fue a parar tanta solidaridad de los platenses que realizaron las donaciones. Nada fue transparente ante semejante muestra solidaria, como ocurría con todo lo que se hizo y no se hizo durante los años más oscuros de la Argentina, desde 1976 hasta 1983.
Se cumplen hoy 8 de mayo nada menos que 41 años de «24 horas por Malvinas», un programa especial de 24 horas que duro desde el sábado 8 al domingo 9 de mayo de 1982 que tuvo por objetivo la recaudación de dinero y donaciones de todo tipo para el “Fondo Patriótico Malvinas Argentinas”, que fue creado durante el conflicto bélico con Gran Bretaña.
El programa fue emitido por la TV estatal ATC “Argentina Televisora Color” hoy la TV Pública. La conducción del programa estuvo a cargo de “Cacho” Fontana y Lidia “Pinky” Satragno, la programación contó con la participación de numerosas personalidades del ambiente político, artístico y deportivo que se acercaron a los estudios de ATC para realizar donaciones y pedir la colaboración del público.
En nuestra ciudad de La Plata el evento tuvo lugar en el Club Atenas de avenida calle 13 entre 58 y 59 donde pasaron numerosos artistas entre ellos Horacio Guarany a pesar de que estaba prohibido por la dictadura militar.
El dinero y lo recaudado para el fondo quedó bajo sospecha ya que nunca pudo acreditarse que llegara a los verdaderos destinatarios, nuestros soldados que luchaban por nuestras Islas Malvinas que fueron son y serán Argentinas.
Las fotos que se publican en este diario son realmente impactantes. Fueron tomadas por el fotógrafo Amancio Loza (Tatín) y muestra a las autoridades de ese momento del Banco Nación de La Plata, de 7 y 48, haciendo el recuento del oro donado por los platenses. No fueron gramos, por supuesto, sino muchos kilos del metal más preciado que la gente donó para ayudar a sus soldados, incluso a muchos no les importó el valor sentimental que podía llegar a tener la joya que llevaban para sumarse al evento solidario. Tampoco les importó a los dictadores cívicos-militares, porque jamás brindaron detalles de a dónde mandaron toda la solidaridad de un pueblo que confió en un gobierno realmente diabólico.