El fútbol que no queremos: racismo y xenofobia

Un escándalo a nivel mundial que va más allá de lo que sucedió en el verde césped de aquel recordado River 8-Jorge Wilstermann 0

racismo y xenofobia

El partido en el que Jorge Wilstermann perdió por goleada ante River Plate

Historia de racismo y xenofobia.-   En el marco de un partido internacional por Copa Libertadores, jugado en el Monumental en 2017, hinchas del club Jorge Wilstermann de Bolivia fueron atacados a plena luz del día, algunos de ellos resultaron acuchillados, amedrentados y emboscados por barras bravas de River Plate. Desde la entidad boliviana sostienen hoy en día que «este ataque habría tenido cómplices vinculados a la política, la dirigencia del fútbol e incluso la Conmebol». Por eso el caso fue judicializado. 

En la presentación realizada se destaca que se habría violado los derechos humanos, además del agravante que es la «intencionalidad institucional de humillar al equipo de Jorge Wilstermann por medio de un accionar mafioso y xenófobo».

Agregaron que River habría «ideado una estrategia y la habría llevado adelante mediante un conjunto de acciones, tanto para acoquinar a los jugadores y cuerpo técnico del conjunto rival, con la ayuda de la barra brava (brazo ejecutor) que se acercó al Hotel Sheraton donde se hospedaba el plantel de Wilstermann, para allí agredir, con manifiesta sevicia, a las personas de origen boliviano que esperaban concurrir al partido».

Y se sostiene en la denuncia que «nunca se hubiera concretado este supuesto salvaje acto de xenofobia sin la connivencia de las fuerzas de seguridad las cuales prácticamente le otorgaron zona liberada a los mafiosos barras bravas de River».

El partido del 21 de septiembre de 2017 en el Estadio Monumental de River fue triunfo 8-0 para el equipo de Marcelo Gallardo, con cinco goles de Ignacio Sccoco, dos de Enzo Pérez y el restante de Ignacio Fernández. Una noche histórica para el “Millonario” donde accedió a las Semifinales con un global de ocho a tres.

TESTIMONIOS DE ESE DIA NEGRO PARA EL EQUIPO DE BOLIVIA

Grover Vargas, presidente de Jorge Wilstermann, analizando los hechos que sucedieron señaló: «Nunca fuimos maltratados en ningún viaje, en ningún partido como lo sufrimos en nuestra visita a River Plate en 2017. En las afueras del hotel hubieron hasta acuchillados y pese al reclamo que hicimos nadie dijo nada. Todo lo que se ha dicho de ese odio racial es verdad».

Dirigentes de esta institución sostuvieron que «hay una acción penal,  Sebastián Casanello es el juez que debe actuar y el fiscal Carlos Rivolo no ha querido darle intervención al INADI y al Estado Boliviano. El fiscal se ha negado. Ese 8-0 fue producto de una intervención mafiosa. Hay una ley en vigencia, las víctimas hicieron las denuncias y fueron cajoneadas».

Esa ley en vigencia es la Ley 5847, es un Régimen integral para eventos futbolísticos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La intención de este objeto fue «preservar la integridad física y patrimonial de las personas, en ocasión de realizarse eventos futbolísticos, antes, durante y post de los mismos, y en el traslado de las parcialidades y delegaciones».

HABLA UNO DE LOS DENUNCIANTES

En declaraciones a 90lineas.com, Sergio Parodi, uno de los denunciantes manifestó: «Hubo odio racial colectivo, el objetivo era eliminar al equipo boliviano. La situación está clara, se diseñó un plan programado con barras bravas. Se utilizó una mafia con cobertura estatal en el contexto de un torneo internacional. Fueron tratos inhumanos, actos de lesa humanidad indescriptibles”.

Agregó: “Conmebol no ha hecho ningún tipo de mención a lo sucedido, tampoco por parte de FIFA. El presidente de Wilstermann quiso hablar con dirigentes de River pero ellos no quisieron, además pidieron que no se inicien acciones judiciales”.

Por último deslizó: «Se puso música muy fuerte para evitar la charla técnica en el vestuario, además se tiraron bombas de estruendo. No hay forma de que Bolivia saliera bien parada, Bolivia se fue humillado con ese 8-0».

Repasando algunos datos del club, Jorge Wilstermann, es una institución de Bolivia fundada el 24 de noviembre de 1949, el club está en la ciudad de Cochabamba.

En reiteradas ocasiones, José Luis Félix Chilavert González, ex arquero de Vélez y Paraguay, denunció pública y penalmente los manejos que tuvo la Confederación Sudamericana de Fútbol, de quienes mencionó que recibió amenazas hacía él y su familia.

“El presidente de la CONMEBOL gana más de 100 mil dólares por mes. Los presidentes de cada federación ganan alrededor de 80 mil dólares al mes. Estos dirigentes tienen salarios millonarios. Esto es una lucha de clases, de poderes”, manifestó el exarquero en diálogo con Bolivisión.

Y agregó: «Me solidarizo con la gente de Wilstermann. El día previo al partido le cortaron la electricidad para hacer el reconocimiento del campo. El clima hostil que sufrieron no es normal. Ojalá que la gente del club se siga animando a denunciar, el fútbol tiene que ser transparente».

LA BATALLA DE CHILAVERT Y LA CONMEBOL

Esta batalla entre José Luis Chilavert y el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, irá a juicio oral en Asunción ante la falta de acuerdo en la demanda penal por difamación, calumnias e injurias presentada contra el primero por el titular del órgano rector del fútbol sudamericano. Se espera que esto se dé a finales de este año.

Hablando sobre los dóping positivos que ese día dieron dos de los jugadores de River, deslizó: «Hasta hoy en día no sabemos que sustancia consumieron los jugadores de River que dieron positivo de dóping. Mi solidaridad con la gente de Jorge Wilstermann y hay que ir hasta el final».

Dando sus ideas sobre la discriminación y las drogas fue contundente: «Entre todos juntos tenemos que luchar contra la discriminación, el racismo, más la violencia porque eso no es el camino para triunfar en el fútbol. Hay que evitar las drogas, que sean competencias libres, sanas y que gane el mejor”.

«Justo cambiaron al árbitro. Sres del Wilstermann tengan los ojos bien abiertos. Juegan contra la Conmebol No contra River», publicó José Luis Chilavert en la previa del partido de vuelta entre ambos equipos. En dicho encuentro el juez designado era Roberto Tobar pero cómo se lesionó durante el curso de capacitación del VAR, Julio Bascuñán fue designado para arbitrar el cotejo.

Raúl Olivares, arquero del Jorge Wilstermann en esa noche ante River, en declaraciones con el programa La Nota con Roma, manifestó: “Ignoro la fuerza que pueda tener River en la Conmebol, pero de que hay algo raro, hay, que quizá hoy día no se va a saber, pero un día se sabrá”.

Y añadió: «Nunca vi un ritmo así, nunca vi en ningún equipo… creo que ese ritmo es del Barcelona, del Real Madrid o el Paris (PSG). Nunca vi un ritmo igual, pero sé que la calidad que tienen, es indiscutible».

Por último cerró: «Fue una noticia grave, pero no tuvo el impacto de una noticia grave. Si hubiera tenido el impacto que debía, River tendría que haber sido descalificado… alguien le bajo el perfil de eso. No sé, pero me parece muy extraño, no sé cuántos jugadores de River dieron positivo, creo que siete y que luego supuestamente fueron 2, algo extraño”.

Uno de los abogados que presentó la denuncia es Alejandro Sánchez Kalbermatenn, es una de las personas que impulsó el FIFA Gate.  Esta denuncia son resolver envuelve por negligencia a muchos referentes político de ese entonces en la Ciudad de Buenos Aires.

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