El prestigioso poeta argentino Juan Gelman nació en Buenos Aires el 3 de mayo de 1930 y falleció el 14 de enero de 2014 en México DF, hace exactamente nueve años.
Fue escritor, periodista, traductor y militante en organizaciones guerrilleras. Exiliado durante la dictadura cívico-militar de 1976 a 1983, retornó a la Argentina en 1988.
Buena parte de su vida y de su obra literaria se vieron signadas por el secuestro y desaparición de sus hijos y la búsqueda de su nieta, nacida en cautiverio.
Fue el cuarto argentino galardonado con el Premio Miguel de Cervantes, luego de Jorge Luis Borges, Ernesto Sábato y Adolfo Bioy Casares.
Se lo considera uno de los grandes poetas contemporáneos de habla hispana.
Cinco años antes de hallar a su nieta, Macarena, Gelman escribió la “Carta abierta a mi nieta o nieto”, de la cual aquí compartimos un fragmento:
Me resulta muy extraño hablarte de mis hijos como tus padres que no fueron. No sé si sos varón o mujer. Sé que naciste…
Ahora tenés casi la edad de tus padres cuando los mataron y pronto serás mayor que ellos. Ellos se quedaron en los 20 años para siempre.
Soñaban mucho con vos y con un mundo más habitable para vos. Me gustaría hablarte de ellos y que me hables de vos. Para reconocer en vos a mi hijo y para que reconozcas en mí lo que de tu padre tengo: los dos somos huérfanos de él. Para reparar de algún modo ese corte brutal o silencio que en la carne de la familia perpetró la dictadura militar. Para darte tu historia, no para apartarte de lo que no te quieras apartar. Ya sos grande, dije.
(Escrita en 1995 y publicada en Brecha el 23 de diciembre de 1998)

A los pocos días de su fallecimiento, visité en Casa de las Américas al querido Roberto Fernández Retamar, quien estaba organizando un gran homenaje en memoria de su amigo Juan Gelman. Hablamos de Juan, de su obra y de su vida con mucho sufrimiento. Hoy ya no están Juan ni Roberto, pero dejaron un legado impresionante que trasciende a todos nosotros.
Cuando
Cuando los viejos eran otros
los veíamos pasar frágiles,
ayudados en su camino,
temblorosos, pensando acaso
en su largo pasado, y
en su incierto y breve futuro.
Qué diferente eras, oh vida,
cuando los viejos eran otros.
Roberto Fernández Retamar – poeta y pensador cubano