nación paraliza obras en pba
«El caballo de Atila, rey de los hunos, se llamaba Othar, y era de una raza salvaje euroasiática ya extinta conocida como tarpán. Se decía que por donde pisaba, no volvía a crecer la hierba… Esta frase es una alegoría de todo aquello que se destruye y que luego es muy pero muy difícil de revertir».
Al parecer, por Argentina en general y por la provincia de Buenos Aires en particular está cabalgando desde hace unos 11 meses Othar, el caballo de Atila.
Axel Kicillof reunió a los 135 intendentes bonaerenses para denunciar que en la principal provincia argentina «Milei» ha paralizado unas 1.000 obras. En ese contexto, la novedad de las últimas horas es que desde la Casa Rosada también se empezaron a frenar en seco obras que tienen garantizada la financiación por parte de organismos internacionales, como el BID y la CAF. Ergo, no son recursos estatales ni el objetivo es el mentado «equilibrio fiscal». «Hay una decisión política», confió a 90 Líneas un profesional que trabaja en la obra pública desde hace unos 25 años.
El gobernador provincial, en tanto, adelantó que se elevará un reclamo conjunto a la Casa Rosada, con la firma de los intendentes de todos los espacios políticos, a fin de dar pelea contra lo que denominó «una especial sed de venganza» de la administración de Javier Milei para con la jurisdicción que concentra casi el 40% de la población argentina, el 35% del PBI general, el 50% del PBI industrial y el 40% de los fondos coparticipables, a cambio de lo cual recibe apenas el 20% (ver Chequeado.com).
«Frenar la obra pública es un crimen social», sentenció Kicillof en referencia al brutal ajuste del Gobierno nacional, al tiempo que presentó un video demostrativo de casi dos minutos de duración.
Posteo y video de Kicillof en este link: https://t.co/Bo0r0ajpEg» / X
No es el equilibrio fiscal
El gobierno de ultraderecha siempre justificó y justifica el recorte en obra pública, el incumplimiento en las transferencias a las provincias, el desfinanciamiento de la educación pública básica y universitaria, el desfinancimiento de la salud pública, la pauperización de las jubilaciones, pensiones y los ingresos de los trabajadores a costa de un mercado interno que registra caídas históricas, y un largo etcétera, en el «equilibrio fiscal».
«Equilibrio fiscal a costa de más desequilibrio social, más desigualdad social, más dolor», definió Kicillof. El «veranito financiero» de Milei-Caputo del que tanto se habla (baja del dólar, caída del riesgo país), en rigor representa la fiesta de los especuladores financieros merced a una depresión de la actividad económica con escasos antecedentes. «Recorte de las jubilaciones, menor inversión en salud y educación, rebaja de impuestos a los millonarios (bienes personales), recorte de fondos a provincias para jubilados, docentes, transporte, seguridad y total suspensión de la obra pública», disparó Kicillof.
Pero cuando el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos bonaerense, Gabriel Katopodis, señaló que los intendentes reportaron la paralización de obras en edificios educativos, viviendas sociales, centros de salud y, entre otros «rubros», plantas potabilizadoras, saltó que en la Provincia están parando las obras con créditos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), o sea, fondos que provienen del exterior y están garantizados, es por ello que -hasta ahora- no habían sido tocadas. Pero eso cambió.
«Es una maniobra política muy explícita, pues eso nada tiene que ver con el equilibrio fiscal. Se trata de una decisión puramente política para perjudicar a la provincia de Buenos Aires», reveló un alto funcionario a este medio, y añadió que hay casos en La Pampa. Dos provincias que no firmaroin el RIGI. ¿Casualidad?
«En esos casos, no es falta de dinero. No es porque ‘no hay plata’, ya que esos fondos están garantizados. Es una decisión lisa y llanamente política«, remarcó, para apuntar que «ya se han mandado decenas de telegramas de despidos a trabajadores, técnicos, profesionales, y en horas comenzarán a pagarse las indemnizaciones. Un desquicio absoluto». San Antonio de Areco, Pehuajó, Villa Gesell, Saladillo, General Paz, son apenas algunos de los distritos afectados.
«Frente al abandono total de un Gobierno nacional que se borró, nosotros actuamos como un escudo y como una red para atenuar el daño social que produce Milei. Sin embargo, por más esfuerzos que hagamos, no alcanza. No somos una isla ni queremos serlo«, puntualizó el gobernador bonaerense.
Educación, ¿para qué?
Fuentes del SUTEBA indicaron que el gremio docente está terminando de realizar un relevamiento de las obras escolares paralizadas en la provincia de Buenos Aires.
Hasta ahora tienen confirmadas «74 escuelas paralizadas. Hay 73 con convenios tripartitos -Nación, Provincia, Municipios-, más una con financiación del CAF (ex Corporación Andina de Fomento, renombrada Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe)», detallaron. Añadieron que «estas obras nacionales dependen del presupuesto de Nación, que además no fue actualizado acompañando el 118% de devaluación ni el proceso inflacionario. Se está subejecutando en general. Y esto afecta a infraestructura. Son los fondos educativos que reclamamos que se transfieran a las provincias».
98% menos de fondos que en 2023
En ese sentido, un informe lapidario de CTERA indica que comparando los primeros 7 meses de 2023 con los primeros 7 meses de 2024, el ítem Infraestructura y Equipamiento escolar pasó de 31.629 millones de pesos el año pasado a apenas 2.166 millones este año, lo que implica una variación real de menos 98 por ciento de fondos (-98%).
En relación al 2023 los fondos para Infraestructura escolar se recortaron un ¡98 por ciento!
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Pero como si eso fuera poco, el informe revela que las partidas para Educación y Cultura en general se redujeron un 41,6% interanual (2023 vs. 2024), y para colmo, hasta el 31 de julio de 2024 se ejecutó solamente el 44,7% del presupuesto súper-ultra-archi recortado. Ergo, desde el 10 de diciembre de 2023 hasta el 31 de julio de este año, el Gobierno nacional subejecutó en un 55,3% el presupuesto educativo.
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Los fondos para Educación y Cultura en 2024 sufrieron un recorte de 41,6% respecto del 2023
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Hasta el 31/07/2024 sólo se ejecutó el 44,7% del presupuesto educativo
