El uso de plasma convaleciente como tratamiento en pacientes ambulatorios fue actualizado por la Sociedad de Enfermedades Infecciones de América (IDSA, en sus siglas en inglés). La organización sugiere ahora administrarlo en pacientes con COVID-19 con alto riesgo de progresión a enfermedad grave y sin otras opciones de tratamiento.
La actualización fue publicada el 8 de este mes, y recomienda la utilización de plasma convaleciente de Covid-19 dentro de los 8 días posteriores al inicio de síntomas. El informe detalla que en pacientes ambulatorios, el uso de plasma como tratamiento puede ser más eficaz si el producto utilizado contiene títulos elevados de anticuerpos neutralizantes; y si se usa al inicio de sintomatología clínica o en subpoblaciones de pacientes que no tienen un respuesta inmune humoral adecuada, incluso en etapas posteriores de la enfermedad.
Por otro lado, la revista médica británica The BMJ, publicó esta semana un estudio cohortes multicéntrico coordinado por el especialista en clínica médica, Martín Salazar, quien se desempeña en el hospital “San Martín” de La Plata, con la participación de otros profesionales de la cartera sanitaria bonaerense. La investigación especifica que la administración de plasma convaleciente dentro de los 3 días posteriores al ingreso hospitalario en pacientes con COVID-19 ingresados en el GW, o en la UCI sin necesidad de ventilación mecánica, se asoció con una disminución de mortalidad a los 28 días, en comparación con su administración tardía.
Dicho estudio se llevó a cabo entre los meses de mayo y octubre del 2020, e incluyó pacientes hospitalizados de 18 años en adelante, con COVID-19 de moderado a grave.
De 4719 pacientes que recibieron plasma convaleciente, 3036 (64,3%) estaban en la sala general, 1171 (24,8%) en la unidad de cuidados intensivos (UCI) y 512 (10,8%) en la UCI con ventilación mecánica. Se administró plasma convaleciente a 3113 (66%) pacientes dentro de los primeros 3 días de ingreso hospitalario, a 1380 (29,2%) entre 3 y 7 días, y a 226 después de 7 días. La mortalidad a los 28 días fue, respectivamente, 18,1%, 30,4% y 38,9% (p<0,001).
En el modelo de regresión, la administración de plasma convaleciente dentro de los primeros 3 días de ingreso se asoció con una mortalidad reducida a los 28 días, en comparación con la administración después de 7 días (OR 0,40, IC del 95 %: 0,30 a 0,53). La administración temprana de plasma convaleciente se asoció con una disminución significativa de la mortalidad en pacientes en sala general (OR 0,45, IC 95% 0,29 a 0,69) y en UCI (OR 0,35, IC 95% 0,19 a 0,64), pero no en aquellos que requirieron tratamiento mecánico.
La provincia de Buenos Aires fue pionera en el tratamiento con plasma convaleciente en nuestro país. La evolución favorable de los primeros pacientes que recibieron este tratamiento en el mes de mayo de 2020 llevó a los investigadores de distintas áreas de Salud, a avanzar en estudios científicos que profundizaron el conocimiento sobre su impacto en la reducción de la mortalidad por coronavirus. Fue así que se desarrolló un protocolo de “Registro Único de Donantes de Plasma de Convaleciente Covid-19” para iniciar los primeros estudios en la Provincia.
El plasma convaleciente se ha utilizado como inmunoterapia pasiva para la prevención y tratamiento de infecciones durante más de 100 años. “Se cree que el mecanismo es la neutralización de patógenos, aunque las células celulares dependientes de anticuerpos la citotoxicidad y el aumento de la fagocitosis también pueden desempeñar un papel”, cita la recomendación publicada por la IDSA.
La organización detalla que en los últimos años, se ha revivido el interés en este enfoque como un medio para abordar epidemias virales como el Ébola, SARS-CoV-1 y MERS. En la pandemia actual, el plasma convaleciente obtenido de personas que se han recuperado de COVID-19 se ha utilizado en más de 100,000 pacientes con infección de moderada a grave.