Por Mauricio Vallejos
El pasado domingo 12 de febrero la cinta Argentina 1985 ganó el premio más prestigioso de la industria cinematográfica en hispano américa, el Goya. En enero pasado también ganó El Globo de Oro que suele considerarse como un parteaguas para el galardón de la Academia. El escenario parece inmejorable para que suceda lo mismo con el Oscar, pero debemos tener en cuenta que habrá un film que será su principal competidor, la película alemana Sin Novedad en el frente.
La cinta adapta la novela homónima de Erich María Remarque de 1929, siendo esta la primera vez que es llevada al cine por productores alemanes, anteriormente siempre fue llevada a la gran pantalla en Hollywood.
Ahora bien, el film argentino tiene una nominación -mejor película internacional- frente a las nueve de la película germana.
Entre las principales nominaciones de Sin Novedad en el Frente están:
- mejor película
- Mejor Película Extranjera
- Mejor Guión Adaptado
- mejores efectos visuales
- mejor maquillaje
- mejor banda sonora
- mejor fotografía
- Diseño de Producción
- Mejor Sonido
¿Esto quiere decir que Argentina 1985 no tiene posibilidades? de ninguna manera, hay sobrados casos de películas con muchas nominaciones que perdieron muchas categorías, no es el mismo rigor para elegir las nominadas que para la ganadora. No será fácil pero la cinta argentina ha hecho un camino de premios que parece favorecerla.
La gala de los Oscar tendrá lugar en la madrugada del lunes 13 de marzo de 2023
Cabe recordar que tras ganar el Globo de Oro a la mejor película de habla no inglesa, Argentina 1985, la cinta de Santiago Mitre, fue formalmente nominada al Oscar en la categoría mejor película internacional.
Así, Argentina va por su tercera estatuilla tras La historia oficial de 1985 y El secreto de sus ojos de 2009. El hecho de que el cine nacional vaya en busca de «la tercera» hizo que las comparaciones con el reciente título mundial de fútbol, el tercero en la historia de la Selección, dispare todas las bromas y alimente la expectativa.
El filme
Corría el año de 1982 y Silvio Rodríguez estrenaba una de sus obras más icónicas, Canción urgente para Nicaragua, una muestra de amor y solidaridad a la revolución sandinista que había triunfado en 1979. Una composición que parecía estar anclada en un contexto determinado ha sido, finalmente, una contribución al futuro, algo muy similar a lo que pasa con Argentina 1985.
La cinta cuenta el trasfondo del histórico Juicio a las Juntas llevado a cabo tras la recuperación democrática de 1983. El protagonista es el fiscal Julio Strassera (Ricardo Darín), al cual le llega la responsabilidad de investigar las violaciones a los derechos humanos perpetrados por la dictadura cívico-militar, una causa donde prácticamente nadie quiere involucrarse en el Poder Judicial, pero que aun así llevará adelante.
El director y guionista es Santiago Mitre, quien saltara a fama por su cinta El Estudiante de 2011. Es un cineasta cuyas obras siempre tienen un fuerte contenido político e intrigas de poder. Su obra de mayor trascendencia fue La cordillera (2017), también protagonizada por Darín, que contaba las disputas de poder y el trasfondo oscuro de un presidente argentino en una cumbre diplomática.
En este caso, la película podría enmarcarse dentro del género de cine judicial, aunque sin dudas tiene mucho de film político e histórico. Y tiene mucho del estilo de Mitre, con planos secuencias largos en espacios cerrados y grandes planos generales, en especial en las escenas de audiencias. No obstante, es notorio que, a diferencia de El estudiante, e incluso de La Cordillera, esta parece una obra que apunta al gran público. Y eso es algo bueno.